A LAS POTENCIAS NO LES INTERESAN LOS DERECHOS HUMANOS
"Lo que está en juego en Siria no es la democracia ni las libertades, sino los intereses de las grandes potencias para mantener su hegemonía en Medio Oriente y, a nombre de los derechos humanos, derrocar gobiernos que no siguen sus lineamientos".
Los medios de comunicación han mentido sistemáticamente sobre lo que pasa en Siria, pues es claro que las manifestaciones pacíficas de partidarios del Gobierno y de la oposición no fueron reprimidas por las autoridades gubernamentales.
Por el contrario, en nombre de la ayuda humanitaria, la defensa de los derechos humanos y de la 'responsabilidad de proteger', potencias imperiales y algunos de sus aliados arman, financian, asesoran y entrenan milicias armadas de oposición para derrocar al Gobierno sirio.
El caso de Libia demuestra que el uso de las fuerzas foráneas para derrocar a un Gobierno legítimo genera solo caos, más violencia y más violaciones de los derechos humanos. Es evidente que esas potencias y sus aliados no quieren la paz, que no les importan los derechos humanos ni la democracia, que no creen en el diálogo político para encontrar una salida pacífica en Siria" n
(*) Apartes de su intervención ante la Asamblea de la ONU, el lunes, recogidas por la agencia EFE.