Aburridos terminaron en el DIM
Levantar la cabeza y no pensar que están acabados. Esa fue la sugerencia que les hizo el técnico Santiago Escobar a los jugadores del Medellín después del partido con Defensor Sporting, por la Copa Santander Libertadores.
El estratega se reunió con sus dirigidos la misma noche del juego en el sitio de concentración y, a calzón quitado, se dijeron las verdades. Analizaron las fallas que impidieron el triunfo que se necesitaba y que los dejaba con un pie en los octavos de final. "Es una evaluación que siempre hacemos con respeto, pero con tono enérgico si es necesario", dijo el estratega.
El empate 0-0 frente al conjunto charrúa denotó falencias ofensivas en el Medellín, que venía de conseguir un valioso punto en el estadio Morumbí, de Brasil, ante el poderoso Sao Paulo.
William Arboleda, quien ingresó por el paraguayo Isidro Candia y estuvo cerca de marcar gol (su remate pegó en el travesaño y en la espalda del arquero Martín Silva), dijo que "estamos aburridos porque el objetivo era sumar los tres puntos en casa, pero el rival se defendió bien".
A la mala noche se sumó la lesión de Andrés Ortiz, quien por fortuna evoluciona bien, según del médico Édgar Méndez, al señalar que tiene una fatiga muscular que será analizada de nuevo hoy con un examen bioquímico.
El popular Álex argumentó que el hecho de no alcanzar el liderato del grupo cuatro los puso a reflexionar, pero que la Copa es un torneo muy variable y "por fuera también pueden triunfar".
En cuanto a la misión que le encomendó el Sachi Escobar, Arboleda advirtió que está satisfecho porque tuvo una clara opción de gol y en otra dejó a Jackson Martínez a punto de anotar. Eso sí, aceptó que debe mejorar el estado físico para tener más continuidad en el juego.
Su trabajo convenció tanto al técnico Escobar que desde ayer lo anunció en la formación titular del sábado frente al Santa Fe, en remplazo de Candia, a quien le quiere dar un descanso y la oportunidad de retomar el nivel de las primeras presentaciones.