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Bien cuidada se arrienda más fácil

Una vivienda en buen estado tiene mayores posibilidades de encontrar inquilino, dicen expertos. Preste atención a pintura, cocina, baño y elimine las humedades.

11 de marzo de 2011

Cada día que pasa desocupada, una vivienda destinada para alquilarse representa una pérdida de dinero para su propietario.

Y aunque en ocasiones la ausencia del inquilino responda al ciclo normal de oferta y demanda, es preciso analizar ciertos aspectos que podrían ayudar a que la vivienda tenga más posibilidades de encontrar quién la ocupe.

Un factor fundamental es fijar un precio justo. Camilo Mora, gerente de Bien Raíz, explica que el canon de un inmueble lo da el mercado dependiendo del estado de la propiedad y de la demanda y la oferta. También influye su área y el lugar donde esté ubicado.

De acuerdo a la ley 820 de 2003 el precio del canon de arrendamiento para los inmuebles destinados a vivienda no debe ser superior al uno por ciento del valor comercial o exceder el equivalente a dos veces el avalúo catastral vigente. Peritos avaluadores y profesionales inmobiliarios son los expertos a consultar para llegar a un precio de arriendo justo.

Bien cuidada
"Definitivamente, un inmueble bien cuidado y presentado, limpio y en condiciones óptimas para ser habitado, se arrienda más fácil", afirma Camilo Mora. Lo mismo piensa Luis Fernando Ríos, gerente de Arrendamiento Su Vivienda, quien dice que es importante que la vivienda esté libre de humedades, goteras y problemas eléctricos.

Desde su experiencia, cuenta que en lo que más se fijan las personas al momento de tomar un inmueble en arriendo es que tenga buenos acabados en pisos, cocinas y baños, y que estos no tengan ningún desperfecto, lo mismo que la pintura esté en óptimas condiciones.

"Unos grifos malos o una fuga de agua representa un pago excesivo en los servicios públicos para el arrendatario", apunta Ríos.

Agrega que otras comodidades que hacen una vivienda más atractiva para arrendar es contar con patio o zona de ropas amplia, garaje o parqueadero, servicio de gas, clóset y cocina integral, "porque ya muy pocas personas tienen el antiguo escaparate o estufa y horno", comenta Luis Fernando.

De esta forma, más que un gasto, invertir en arreglos y reformas sencillas en la parte física ayudarán a hacer el inmueble más atractivo para posibles inquilinos.