Buque de Shell encalló cerca de Alaska
Un enorme buque de sondeo petrolero perteneciente a Shell encalló en la noche del lunes cerca de Alaska, dijeron funcionarios de Gobierno y la compañía.
El barco de nombre Kulluk se soltó de una de sus líneas de remolque y se dirigió hacia un sitio rocoso justo frente a la Isla de Kodiak, en donde encalló a las 21.00 hora de Alaska, informaron los funcionarios.
La tripulación de 18 miembros había sido evacuada de la embarcación por guardias costeros el sábado debido al riesgo de tormenta.
Con vientos de hasta 100 kilómetros por hora y olas en el Golfo de Alaska de hasta 11 metros, los equipos de emergencias fueron incapaces de mantener segura a la embarcación, dijo el comandante de la guardia costera Shane Montoya, líder del equipo que vigila el incidente.
"Estamos entrando ahora en la fase de salvamento y de posible respuesta a derrames en este evento", dijo Montoya en una conferencia de prensa en la noche del lunes en Anchorage.
Hubo tres heridos de menor gravedad entre las personas que respondieron al accidente.
No hay reportes de derrames o de daños y un sobrevuelo de la guardia costera en helicóptero no arrojó signos de brillos asociados a manchas de petróleo.
El Kulluk tiene en su interior cerca de 139.000 galones de diesel ultra bajo en sulfuros, además de unos 12.000 galones de fluidos hidráulicos y de engrase.
El incidente con el Kulluk, una embarcación de perforación de clase ártica que pesa cerca de 28.000 toneladas brutas, es un golpe para el programa costa afuera de Shell de 4.500 millones de dólares en Alaska.
El plan de Shell de convertir al área en una nueva área petrolera ha alarmando a ambientalistas y muchos nativos de Alaska, pero ha reunido también fuertes apoyos en la industria.
Grupos ambientalistas y de nativos argumentan que el programa de perforaciones amenaza a una región muy frágil que ya está siendo afectada por el cambio del clima a nivel global.
El Kulluk fue construido en 1983 y estaba en una lista para ser descartado antes de que Shell lo comprara en el 2005. La compañía gastó 292 millones de dólares desde entonces en mejoramientos a la embarcación.