Cómodas y modernas en la oficina
He leído todos los comentarios de esta semana en mi blog ¿Qué me pongo? y la conclusión es clara: todos piden más moda para el diario y menos para bodas.
Hoy les daré algunas claves, con imágenes y sugerencias específicas.
La primera es la pinta de la izquierda en blanco y negro, con cinturón delgado en tono metalizado y cartera tipo sobre o clutch.
Mis claves:
Es un look moderno y algo formal, que se ve bien en días de oficina. Blanco y negro se mantiene como una mezcla clásica y fuerte.
La combinación de la blusa de manga corta con el pantalón de bota muy ancha o pata de elefante, es muy chic y se ve bien con zapatos despuntados muy altos o cubiertos de punta pronunciada.
El cinturón delgado es una especie de dos en uno: nos ofrece la tendencia del cinturón y el tono metalizado, que se ve bien en un solo complemento o prenda. Para las noches, se puede exagerar un poco más, sin olvidar que cualquier tono brillante nos aumenta la figura.
Esta pinta de oficina se puede transformar con unas sencillas claves en un look de noche: pueden optar por accesorios brillantes, sandalias altas y una chalina vistosa para usar solo en la noche.
La otra propuesta es la respuesta a una inquietud surgida en el blog: ¿y si mi trabajo no exige tanta formalidad y es en un medio más creativo, qué me pongo?
Mi idea es la pinta de la derecha: una falda (es una prenda formal en nuestro imaginario), que adquiere vanguardia y estilo joven con diseños como este de Marithe & Francois Girbaud.
Mis claves:
Elegir siempre piezas "diferentes". Con algún estampado llamativo o con el manejo de otro tipo de telas. Miren que esta falda combina varias texturas y el cierre funciona de arriba hacia abajo.
Decirles no a las faldas de fondo entero. Les sugiero visitar en Vía Primavera la tienda Faldas de Autor, en la que encontrarán atractivos diseños.
Combinar una falda con cierto aire de formalidad con una camiseta básica, tipo Arkitect o Gef. Y añadirle collares de colores o una chaqueta de yin con un broche.
El detalle de los zapatos es la cereza del postre. ¡Suerte!