Con Armstrong cayó el reinado de la mentira
La pérdida de los siete títulos del Tour y la sanción de por vida al exciclista es un golpe mortal a este deporte.
El golpe para el ciclismo mundial puede llegar a ser mortal.
La sentencia de la UCI sobre el caso Lance Armstrong , quien fue despojado de los siete títulos consecutivos en el Tour de Francia y la descalificación de por vida, traerá inevitables consecuencias sobre el pedalismo del planeta.
El corredor estadounidense verá obligado, en principio, a devolver los premios por 2,9 millones de dólares que ganó de forma individual en la Grande Bouclé, la que dominó a placer a partir de 1999, hasta el año 2005.
Igual, esos siete títulos quedan eventualmente desiertos.
La sentencia del máximo organismo que controla el ciclismo mundial, además de ofrecer excusas por no haber podido encontrar evidencias en los controles al dopaje realizados en esos Tour de Francia, se verá ahora acompañada de la aplicación de medidas más severas, sobre todo cuando en el 2013 se cumplirá la edición 100 años de la carrera.
“Esto de Armstrong es un tema viejo que destruye al mundo del ciclismo. Nadie imagina a la cantidad y calidad de los controles a que nos vemos sometidos los pedalistas que hacemos parte del World Tour de la UCI. Desde hace siete años pasamos toda clase de pruebas, incluso por sorpresa y hasta en vacaciones. Es un momento limpio del ciclismo mundial y preciso se presenta esto que es del pasado”, dijo desilusionado el subcampeón olímpico Rigoberto Urán , el mejor de los jóvenes del Giro de Italia este año.
La Usada, que adelantó la investigación en E.U., recomendó en su informe que no se dé un ganador en los Tours ganados por el estadounidense, debido a que fue una época marcada por el dopaje.
La agencia, advierte AP, sostuvo que 20 de los 21 ciclistas que subieron al podio en el Tour entre 1999 y el 2005 fueron vinculados con dopajes “a partir de admisiones, sanciones e investigaciones”, entre otras cosas. Agregó que de los 45 ciclistas que subieron al podio entre 1996 y el 2010, 36 están igualmente “manchados” por sospechas o comprobaciones de dopaje.
Otra de las implicaciones para Lance Armstrong, es que esta semana también podría despojársele de la medalla de bronce que logró en la contrarreloj de los Juegos Olímpicos de Sydney-2000, además de las posibles demandas de expatrocinadores y las investigaciones que adelanta el Gobierno de Estados Unidos. Un golpe mortal.