Condenan a la Nación por contaminación del río Bogotá
En una decisión sin precedentes el Consejo de Estado impartió una serie de ordenes en materia ambiental. Todas se desprenden de la orden de adoptar las medidas encaminadas a descontaminar el río Bogotá el cual recibe; cada día, mil toneladas de desechos.
El alto tribunal les ordenó a las autoridades formular una política pública integral que permita reformular las estrategias para la recuperación de dicho afluente en un término máximo de 30 años. Dicha inversión se calcula en 6 billones de pesos.
La determinación fue adoptada por la Sección Primera de ese tribunal y cobija a 45 municipios, lo mismo que al Ministerio de Ambiente, a la Alcaldía de Bogotá y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, entre otras entidades.
Al resolver una acción popular, el alto tribunal ordenó un enfoque interdisciplinario, sistémico e interinstitucional para abordar la recuperación y conservación del hidrosistema fluvial de la cuenca del Río Bogotá de una manera integral.
Según explicó el magistrado ponente de la decisión Marco Antonio Velilla, la primera fase de la recuperación de la fuente hídrica cuesta 6 billones de pesos.
En el fallo se ordena la modificación al Plan de Ordenamiento Territorial de Bogotá en 45 municipios ribereños y se insta al Ministerio de Ambiente para que presente en un “futuro próximo” un proyecto de ley tendiente a sanear el río Bogotá.
La idea es que ese proyecto cree, de manera provisional, una Gerencia Estratégica de Cuenca un Consejo Estratégico de la Cuenca Hidrográfica del Río Bogotá para que en cabeza de la CAR (Cundinamarca) se articulen todos los proyectos de adecuación hidráulica y de recuperación del río, así como el Plan de Gestión Ambiental 2008-2038 de la Secretaría Distrital de Ambiente, entre otros.
La sentencia habla del rol que deberá tener la Gestión Integral de la Cuenca Hidrográfica del Río Bogotá y resalta que el trabajo concertado entre las entidades “propenderá por la correcta administración del recurso hídrico y del territorio, el desarrollo económico y social, sanitario, cultural y científico, así como a la protección de los ecosistemas y el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de la cuenca”.
Así, dicho Consejo Estratégico será apoyado por nuevos Consejos de Cuenca Alta, Media y Baja del río que aportarán la información disponible y participarán en la fases previas a la elaboración y declaratoria de un Plan de Manejo y Ordenación de la Cuenca Hidrográfica del Río Bogotá.
Entre las ordenes está “la construcción de las obras de ingeniería, de la estación elevadora, también la operación de las obras de tratamiento en los 45 municipios y la creación del parque coeficiente en Villa Pinzón, Chocontá y San Benito para que en tres años estén dentro del marco del sistema ambiental las curtiembres o busquen otra actividad distinta”.
Además, la Corporación ordenó a las fábricas que están cerca al río que suspendan el vertimiento de desechos al mismo y señaló que se debe controlar la deforestación por los cultivos de papa e integrar la planeación con el uso del suelo, entre otras medidas.
“Por fin habrá una política integral única para la recuperación del Río Bogotá”, dijo al magistrado al indicar que la idea es hacer un manejo integral de las cuencas y el mejoramiento de la calidad de vida de habitantes de la región.
Expresó el magistrado Velilla que con esto se "crea una carta de navegación para la política ambiental del río Bogotá durante los próximos 30 años y modelo para el país".