Histórico

Contar para que el tabú desaparezca

LOS CASOS DE famosos que revelan su lucha contra el cáncer ayuda a la hora de enfrentar la enfermedad. De paso, ayudan a desmitificar este mal.

23 de noviembre de 2011

Una mujer de 38 años, madre de dos hijos, decide detener el tratamiento quimioterapéutico que, por lo menos, alimenta la esperanza de su familia.

Ella sabe bien que el agresivo cáncer abdominal que la invade le deja pocas probabilidades de sobrevivir. La quimio es devastadora y su decisión de pasar los últimos días sin las pesadas consecuencias de este tratamiento no tiene vuelta atrás.

¿Cómo decírselo a su familia? Lo último que quiere la paciente es infligir en ellos un sufrimiento mayor y para esto se ha mostrado mucho más optimista de lo que debería según las predicciones médicas.

Este caso es apenas uno de los que ha abordado el grupo de acompañamiento de Medicáncer. Mario Alberto Ruiz Osorio, psicólogo de la institución, resume en pocas palabras la respuesta a esa pregunta difícil que un paciente con cáncer terminal se hace a la hora de dar a conocer su condición: "Las fórmulas de los libros no funcionan".

Hablar para inspirar
Ruiz Osorio es enfático al afirmar que en este aspecto no hay esquemas preestablecidas. Una cosa es la historia de esta mujer madre de dos adolescentes y otra muy diferente la de aquel joven de 19 años a quien su tía en medio de una discusión le informa que según los médicos su vida está por terminar.

En primer lugar, este psicólogo clínico considera que el paciente debe apropiarse de su diagnóstico. "Una manera de lograrlo es socializándolo. Teniendo la capacidad de hablar de las cosas que les pasan. Teniendo la capacidad de definir frente a los otros qué y cómo es lo que están viviendo", afirma.

Cita como ejemplo el caso de los grupos de apoyo de Medicáncer. Allí, personas que pasaron por cánceres de seno, colon, recto, se reúnen con otros a quienes recién se les diagnosticó la enfermedad.

"Ese solo encuentro con un otro, que ha logrado hacer una vida, se pone como referente para ese que apenas está iniciando. Referentes firmes, sólidos que pueden hablar de su experiencia sin miedo, temor o angustia, van a servir para que otras personas fluyan y salgan adelante", asegura.

En este sentido, Mario Alberto Ruiz coincide con su colega Pilar Fernández, directora de campañas de la Liga Contra el Cáncer. Ella cree que testimonios de pacientes que logran vencer el cáncer son fundamentales para que otros también lo superen.

No obstante, dice, hablar públicamente "no siempre es lo más conveniente, sobre todo cuando se está en el tratamiento".

"Yo tengo cáncer"
Por este camino han optado los personajes que encabezan esta nota. Todos ellos hablaron de su enfermedad sin tener claro el desenlace final de la historia.

Michael Douglas, Lance Armstrong y Hernán Peláez, al parecer lograron superar los cánceres que los afectaban. En el caso de Lula y Chávez la cosa no está tan clara.

"Si alguno de ellos llegara a morir, se crea la idea de que todo el mundo se muere. Por eso es preferible hablar cuando una persona ha superado los cinco años de tratamiento, cuando pasa el periodo peligroso", opina Fernández.

Cuando personajes públicos como ellos se sobreponen a la enfermedad, añade, mucha gente deja de ver el tema como un tabú. Recuerda esta psicóloga de la Liga Contra el Cáncer que antes a un paciente "le decían cáncer y nadie se enteraba. A esa persona se la comía la enfermedad. Hasta pensaban que era contagioso".

Para Pilar Fernández lo mejor es seguir la vida tal cual venía antes del diagnóstico, encausarla como una lucha y contarle solo a los más cercanos ese giro de la vida. "No todo el mundo sabe manejar esta situación", comenta.

Por su parte, Mario Alberto Ruiz se muestra partidario de construir verdades entre "cada uno de los que están implicados".

"Nosotros hablamos de la verdad soportable. No una verdad abrupta, dañina, sino una verdad con la que una familia y un paciente puedan vivir su proceso", apunta este sicólogo que recuerda que "comunicar libera".