El delicioso arte de comer juntos en la cama
Un libro de recetas para cocinar en pareja, que conjuga la fotografía y se cuenta en historia.
El libro es todo lo contrario: con la comida sí se juega. Por eso aunque las páginas sean como las de todos los libros, si le cae un poco de chocolate, nada pasa. "Es para usar y manosear", escribió el cocinero Álvaro Molina , al principio, en lo que él llamó Prólogo del preámbulo.
La cama está servida es un poco de varias cosas. Es de recetas de cocina (23), de fotografía (en todas las páginas hay), de una historia (se cuenta una). También de sexo: "el tema es -agrega Molina- precisamente cocina para parejas".
Está basado en la cocina erótica, a través de una secuencia de historias, que invitan a entrar a la cocina con la pareja, a preparar algo rico. "Para comer, jugar, comer, jugar", se lee en el prólogo.
Todo empezó porque A ndrés Sierra quería hacer un libro de fotografía y el tema culinario le llamó la atención. Álvaro tenía la inquietud por la cocina erótica, desde hace un buen tiempo. Así que el primero invitó al segundo, y el segundo le propuso su idea, tanto que el primero dijo que sí y empezó el proyecto.
Después se encontraron con cuatro estudiantes de gastronomía, que debían hacer una investigación sobre la cocina regional y, con esa disculpa, se fueron hasta la Guajira, donde se tomaron la mayoría de las fotos.
Así es como las recetas se van combinando con el paseo de cuatro jóvenes y todo lo que va pasando en el amor: los ingredientes, los sabores, la preparación, el plato servido. "Es muy divertido de ver, pasan las cosas (y se muestran) que se van contando en la historia".
Con puro afecto
Los protagonistas son Sasha, Zoé, Enrico y Marco. La historia empieza porque les ponen un trabajo en grupo y ellos ni se hablan. El profesor los asignó al azar, para una llamada Expedición culinaria.
Entonces mientras aparecen las recetas y la magia de las imágenes de la cultura Wayuú y de la belleza del paisaje de La Guajira, no solo se van conociendo, sino divirtiéndose en la cocina. Y enamorándose. "Es un libro para adultos, con un contenido erótico muy alto en la fotografía y en los textos ".
Porque precisamente esa era la intención: el amor. Las recetas funcionan para el preámbulo, pero también para conquistar por la boca. De eso está seguro el cocinero. "Siempre he pensado que la cocina es una herramienta para la pareja y la conquista. Tanto para la mujer que necesite conquistar a un hombre, como lo contrario".
Por eso este chef incluyó varias recetas suyas, adaptó otras y hay unas cuantas famosas y otras no tanto.
La idea es que funcionen para la pareja, sí, pero también si se quiere cocinar para la familia, puedan usarse.
Eso sí, tienen una máxima: son fáciles de preparar. "La idea es facilitar, no al contrario. Todas diseñadas para jugar". Las recetas pasan por los mariscos, muchos postres, confituras, salsas. "Hay un montón de elementos, texturas, sabores. ¿Quién dijo que con la comida no se juega?".
El libro lo hicieron en algo más de un año. Había que investigar las recetas, luego vino el tema de producción. Se tomaron tres mil fotos. Y fueron cuidadosos en los detalles. "Es un libro muy bonito", sonríe Álvaro.
Una aventura exquisita para los sentidos. Para ponerle el corazón a la cuchara. Para servírsela encima. Para oler. Para que La cama esté servida.