En investigación: cero pollito rayado
La escasa incidencia de la región en la producción de conocimiento se evidenció ayer en la Conferencia Regional de Educación Superior (Cres) 2008, en Cartagena.
Juan Ramón de la Fuente, vicepresidente de la Asociación Internacional de Universidades (IAU por sus siglas en inglés), anunció el incremento de la investigación como uno de los mayores retos de Iberoamérica.
Los datos de Latinoamérica, Portugal y España, muestran que la masa crítica de la zona está en un nivel paupérrimo.
En Colombia, por ejemplo, sólo hay 109 investigadores por cada millón de habitantes. En países como Argentina la cifra es 720.
El índice de las citas de textos científicos de esta zona en otras partes del mundo es desalentador. En la mayoría de países no pasa del 1 por ciento.
Los textos científicos producidos en Colombia que fueron citados apenas pasaron de 0.01 a 0.11 por ciento entre 1992 y 2003.
En conocimientos patentados también está mal la región: sólo el 0.32 por ciento del total mundial pertenecen a Iberoamérica.
En internacionalización la situación no mejora. De 100 universitarios que están estudiando fuera de su país, apenas 7 son de la región.
Tampoco existe preferencia por estudiantes de otras latitudes: sólo el 3 por ciento de la población mundial que se prepara en un país diferente al de origen viene a hacerlo a América Latina.
Entre los avances de la educación superior que mencionó el ex rector de la Universidad Autónoma de México, están el aumento de la participación femenina en la matrícula y la construcción de redes de trabajo entre las instituciones.
Pasar a las propuestas
La situación es preocupante, pero de la Fuente se mostró confiado en que al cierre de la Cres se llegue a propuestas claras y se atrevió a proponer la suya: dos decálogos de compromisos, uno para las instituciones y otro para los gobiernos.
Que el acceso equitativo esté integrado a las políticas institucionales, es uno de los puntos más destacados de la propuesta para las universidades.
Incluye, asimismo, la necesidad de actualizar la formación pedagógica de los maestros, dar información veraz sobre estudiantes y matrículas, y el compromiso de hacer más investigación.
Para los gobiernos la iniciativa contiene el compromiso de una política educativa que promueva la equidad y el financiamiento a los estudiantes más pobres.
Otros puntos del decálogo son: La promoción de la diferenciación de las instituciones a través de la evaluación, un compromiso mayor con la investigación y fomentar la movilidad estudiantil. Todas, sugerencias para los dirigentes nacionales.
Juan Ramón de la Fuente, sostuvo que su propuesta ha tenido buena aceptación, pero la acogida que tenga podrá conocerse al final de esta tarde, cuando la Cres sea clausurada.
Para llegar a un consenso en cuanto a propuestas, ayer se reunieron durante toda la tarde, y por comisiones, los ponentes y participantes que discuten los ejes temáticos que definen la postura que asumirá la región en la Conferencia Mundial Sobre Educación (CMSE), el próximo año en París.