En Venezuela se asfixia al sector privado
La política del gobierno venezolano ha llevado a una inestabilidad económica que repercute en la producción, el consumo, la inversión y el empleo productivo, aseguran tres generaciones de economistas.
La crisis internacional llegó a Venezuela cuando el país presenta un problema inflacionario que se vuelve crítico, con una producción agrícola en franco deterioro y una dependencia casi total del ingreso petrolero, en una época en que los precios del combustible se encuentra en niveles inferiores a los deseados.
A esta coyuntura se le suma la asfixia que premeditadamente ejercen las organizaciones oficiales sobre el sector privado y el avance del proceso de deterioro institucional, debido a la mayor control que ejerce el Gobierno sobre los el resto de los poderes públicos.
A estas conclusiones llegaron 18 economistas y analistas venezolanos de tres generaciones, quienes elaboraron un documento que bautizaron "Ante la situación económica nacional", para advertir sobre el grave cuadro económico, social e institucional y resaltar el hecho de que los desequilibrios y las distorsiones de los últimos años tendrán un impacto negativo sobre la vida de todos los venezolanos.
El documento, que firman el ex director del Banco Central, Domingo Maza Zavala, el periodista Teodoro Petkoff y los economistas Orlando Ochoa y José Guerra, entre otros, señala que la inflación es un problema que ya se vuelve crítico, en especial para las familias de menores ingresos, a pesar de que existen controles de cambios y precios.
Para los especialistas, las políticas económicas del Gobierno del presidente Hugo Chávez, fundamentadas en controles de diversa índole, represión económica y vulneración de los principios constitucionales de libertad económica y derecho de propiedad, han generado graves distorsiones en patrones de producción y consumo.
El análisis aclara que aunque la crisis económica global ha contribuido a agravar la situación, no se puede señalar como la principal causa de los problemas que afectan hoy a los venezolanos. Antes de que ésta se presentara ya había síntomas graves de deterioro y, como dijo el director de Tal Cual, Teodoro Petkoff, "empeora lo que ya venía mal".
Algunos hechos que respaldan esa tesis son el deterioro de la producción agrícola, la escasa inversión en nueva capacidad productiva industrial y agrícola y la corrupción generalizada. A
demás, el estancamiento en la producción petrolera, el colapso de las empresas de Guayana y la insolvencia de las empresas financieras públicas.
Petróleo, en caída
Durante la época de grandes ingresos petroleros se estimuló la demanda de consumo y crecieron las actividades no petroleras como el sector financiero, las telecomunicaciones, la construcción y el comercio, pero hubo poco avance en la producción manufacturera o agrícola.
Las importaciones también se dispararon y solo en 2008 llegaron a 48.095 millones de dólares.
Desde el año pasado, y tras una bonanza que le significó al país ingresos muy superiores a los previstos, los precios y la producción petrolera han descendido, lo que obligó al Gobierno a reducir el gasto e introducir algunos cambios en materia tributaria.
Los analistas consideran que las medidas que ha tomado el Ejecutivo han sido improvisadas. Recuerdan cómo en 2007 "mientras aplicaba la reconversión monetaria, el gobierno presentó un plan antiinflacionario, que incluía emisiones de bonos en divisas, la reducción del IVA y ampliación del crédito al sector agrícola y una ley especial contra el acaparamiento, la especulación y el boicot".
En estas condiciones, dicen los economistas, se mantendrán la incertidumbre y el deterioro económico en el país.