ESCULCANDO MUNDOS EXTRAÑOS
Pocas noticias del mundo científico llaman tanto la atención como las astronómicas. Quizás es ese afán de conocer lo más remoto. Tal vez por ese halo de misterio que nos entrega observar una noche estrellada, preguntándonos qué hay más allá.
Hace 20 años solo conocíamos los planetas de nuestro Sistema Solar. Ahora son más de mil mundos identificados, casi vírgenes para el conocimiento y otros dos o tres mil posiblemente también planetas pendientes de confirmación.
Es impresionante lo que se ha avanzado en los últimos 50 años en el descubrimiento de eso que existe allá en esa aparente oscuridad que solo puede medirse en años luz para resumir magnitudes enormes.
El año pasado se conocieron los datos de la misión Planck que mejoró los cálculos de la edad del universo: unos 13.820 millones de años. Es increíble. Y solo en el último tercio de esa historia ha sido partícipe nuestro Sistema Solar.
A finales de año se lanzó el telescopio Gaia, que estudiará más de 1.000 millones de estrellas, de los 200.000 millones que puede contener nuestra galaxia y que en su misión podrá detectar otra increíble cantidad de planetas y objetos cósmicos.
En la primera parte de 2013 comenzó a funcionar a plenitud la red Alma de 66 antenas para mirar con mayor precisión donde casi nunca ha llegado el ojo, para conocer la formación de las primeras estrellas y galaxias. Y en el camino surgirán más cuerpos y planetas. Alma tiene la capacidad de detectar señales de vida en esos mundos.
El hombre no ceja en su intento por conocer el universo en el que vive. En el tramo final del año que terminó se reportó que el primer intento por detectar la materia oscura, importante en el devenir del universo, fue infructuoso. Pero el esfuerzo seguirá.
Esto, mientras en nuestro Sistema seguimos aprendiendo sobre los planetas vecinos. A Plutón llegará por primera vez una nave en 2015 y a Júpiter se aproxima otra.
Fascinante. ¿Qué se encontrará en las nuevas observaciones? ¿Cambiarán los hallazgos el modo de actuar de la humanidad? ¿Se pondrán a prueba conceptos filosóficos y religiosos?
El hombre está desafiando los cimientos sobre los cuales se ha basado el avance de las civilizaciones y de la misma humanidad.
Por eso siempre he dicho que mirar al cielo no solo es fácil sino demasiado gratificante.
Maullido: Pasado diciembre, ¿bajará la impresionante ola de inseguridad vivida estas semanas?