Fíjese bien al contratar un maestro de obra
Al contratar a estos trabajadores es importante verificar que ellos cumplan con las competencias laborales necesarias y que sean personas honestas. Y para evitar inconvenientes es mejor no adelantar dinero.
El maestro de obra es la persona que generalmente se busca para hacer determinados arreglos en las viviendas.
Y cuando se contrata a este tipo de trabajador, es común que algunas personas para reducir costos busquen contratarlos de manera informal. Lo que en ocasiones puede suscitar diversos inconvenientes por la informalidad, en sí misma de la contratación.
Por eso, a la hora de contratar un maestro de obra, Luis Eduardo Montoya, instructor de construcción del Sena, recomienda analizar muy bien el tipo de persona que se va a contratar. En primer lugar que esté capacitada para realizar las actividades, y ojalá que tenga como carta de presentación buenos trabajos realizados previamente.
También, juega un rol muy importante la parte de la honestidad, la honradez, la delicadeza, el trato hacia las personas y hacia los mismos trabajadores.
Cuidado al contratar
Un aspecto importante que se debe tener en cuenta para que no se presenten malos entendidos es evitar hacer adelantos de dinero porque además, puede suceder que el trabajador emplee ese dinero para otros gastos y que al final el dinero presupuestado no alcance para realizar las actividades previstas.
"Lo que yo sugiero, basado en mi experiencia, es hacer cortes de obra, es decir que cada actividad realizada obedezca a un corte de obra en determinado tiempo para poder así definir qué plata se le va dando a la persona" afirma el instructor.
Así mismo, enfatiza en la importancia de estar revisando constantemente la calidad de los procesos para que sean eficientemente realizados y cumplan con los estándares establecidos por las normas técnicas en la construcción.
Por otro lado, asevera Montoya que "a muchas personas les gusta contratar globalmente, es decir que se entrega la plata y el contratista se encarga de comprar los materiales, realizar las actividades y separar sus utilidades".
"Yo creo que no debería manejarse así. Si la persona dueña de la obra tiene tiempo, debería ponerse al tanto para estar consiguiendo los materiales, todos los insumos porque de esa manera todos los descuentos le quedarían a él y el material no faltaría en las obras, sólo pagaría las actividades de ejecución. En caso de no tener el tiempo, se puede recurrir a pólizas para garantizar el cumplimiento", agregó el instructor.
Así mismo, es fundamental que el trabajador esté asegurado al Sistema General de Protección Social. Por eso, se le debe hacer esta exigencia o, si es posible, llegar a un acuerdo con él.
¿Donde ubicarlos?
Aunque encuentra que hace falta la creación de un banco que permita ubicar trabajadores con competencias laborales en construcción, Luis Eduardo Montoya explica que a la hora de buscar personal serio, se puede recurrir a la bolsa de empleo del Sena que tiene inscripciones para todas las actividades que se dan en la institución, infinidad de cursos y especializaciones, y sobre todo en construcción.
Así pues, es posible hallar especialistas en mampostería, en enchapes, en estructuras, maestros de obra certificados.
Sobre este tema, es enfático en afirmar que ojalá todas las personas que se contrataran fueran certificadas por competencias laborales en cualquiera de las especialidades porque ahí el Sena avala que esa persona si es competente.
No obstante, también, se debe ser sagaz a la hora de contratar porque además de presentar el certificado, es de suma importancia que el trabajador ejecute bien, conozca los procesos y logre los resultados esperados.