Guión y actores, claves de las producciones brasileñas
El éxito de Avenida Brasil plantea una pregunta ¿qué hace tan exitosas las novelas de ese país?
Es como ver cine en televisión. Ver una película en casa. Ese es el secreto brasileño que tiene a un gran porcentaje de los televidentes colombianos recorriendo la vía más famosa del mundo: Avenida Brasil, la telenovela brasileña que acapara la atención en 127 países.
Lisandro Penagos, comunicador social y docente de la Universidad Autónoma de Occidente, atribuye el éxito de las producciones brasileñas, específicamente de Avenida Brasil a su factura cinematográfica. "Siendo un producto para televisión, trabajan con todos los parámetros del cine: graban en exteriores, la calidad de la imagen es excelente y la narración es muy cercana al lenguaje cinematográfico", dice.
Eso se debe a que los brasileños tienen una escuela de cinematografía muy francesa –nosotros somos muy norteamericanos–, dice el actor y productor Andrés Sandoval, que regresó de Brasil, donde fue coproductor y actuó en el mediometraje Más allá de aquí. "Ellos se dan la licencia de estudiar muy bien la fotografía, tienen muy buen gusto en los detalles, en la composición, en los planos lentos y largos, cargados de simbología", dice.
Poner ese foco que retrata muy bien las relaciones entre los brasileños es otro de sus atractivos, dice el periodista de entretenimiento Víctor Manuel García. "Brasil es muy diferente a los países latinoamericanos, ellos son más abiertos, allá hay rubios con negras, hombres jóvenes con mujeres mayores".
Muy profesionales
Las novelas de Brasil no son las del libreto preconcebido de la TV. Son muy distintas, pues en ellas convergen múltiples historias paralelas, elemento propio del lenguaje del séptimo arte. En Avenida Brasil hay una historia central muy fuerte, pero las que rondan alrededor son igual de importantes, y no solo la complementan sino que tienen peso, dice Penagos.
De ahí, agrega el académico, que la narración y el discurso de la novela brasileña esté más cerca del cine que de la televisión. "Ahí el personaje suda, escupe, sufre, está en un basurero y eso hace que la conexión que se establece con el televidente sea como la que establece el cine con el espectador".
Esta mezcla de venganza, familia, sexo, estelarizada por Jorgito, el futbolista humilde de las favelas (Cauã Reymond), que es una realidad de Brasil, usa la misma fórmula de la bruja malvada contra la cenicienta Nina (Débora, la protagonista) ante el amor imposible, pero en Brasil hacen investigación y "enmarcan la historia de amor dentro de su propio contexto", dice García.
El casting y la actuación son muy profesionales.
"Los brasileños, más que una cara bonita, eligen calidad actoral", sostiene García. Eso explica por qué la protagonista de "Avenida Brasil" no es precisamente una garota, pero sí una actriz muy talentosa y la heroína de los 127 países donde se ve esta producción.