Histórico

Humberto Mendoza, hombre coraje

PESE AL ESGUINCE de ligamento el defensor central espera estar mañana con Nacional en el partido crucial frente al Once Caldas, por el Grupo B de los cuadrangulares semifinales de la Liga Postobón. Al coraje y a la potencia le mezcló gol y los resultados son positivos.

26 de noviembre de 2010

Sinceridad, temperamento, fortaleza, coraje y gol son los ingredientes de la pócima que revitaliza al santandereano Humberto Mendoza.

Esos cuatro primeros elementos nacieron con él hace 26 años. El último lo anexó a su carrera cuando llegó a Nacional en el 2004.

Y sí que le ha servido, porque gracias a la claridad ofensiva y a la disposición personal con la que regresó, luego de 10 meses de lesión, suma tres tantos en la Liga Postobón II, le devolvió el liderazgo que le hacía falta a su equipo y le ha generado puntos importantes al club.

El jueves tuvo que dejar la cancha a los 70 minutos, por un esguince del ligamento colateral medial, según el médico Hernán Luna, pero el zaguero de 1,92 metros asegura que mañana jugará "como sea".

Para Mendoza el compromiso frente al Once Caldas "es sinónimo de vida, el partido más importante de esta temporada y estamos obligados a ganarlo; hay que estar ahí, porque necesitamos los tres puntos para llegar a los primeros lugares del grupo".

El empate 2-2 con Cúcuta le dejó un sabor agridulce a Humberto "por todas las cosas buenas que hicimos", pero también lo tiene motivado gracias a que "Nacional mostró otra cara, volvió a jugar buen fútbol y tuvo muchas ideas con la mano que nos dio David Córdoba".

Esa buena imagen que dejó su equipo es la que tiene pensando a Mendoza en recuperarse este sábado y aprovechar mañana su potencia con la pelota quieta para guiar otra vez al elenco verdolaga hacia una presentación generosa en fútbol y en goles para conseguir la victoria que le permita continuar soñando con la final de la Liga Postobón II.