Histórico

Sindicatos peruanos salieron a huelga

09 de julio de 2008

El presidente de Perú, Alan García, declaró este miércoles que comprende la insatisfacción de alrededor de "un 60 por ciento" de la población de su país por el alza del precio de los alimentos y prometió hacer el mayor esfuerzo por enfrentar esa crisis mundial.

"Quiero que sepan que comprendo la queja de muchísimos peruanos, me ha tocado esta circunstancia, pero es mi responsabilidad hacerle frente", dijo el gobernante al hacer un balance sobre la huelga nacional convocada este miércoles por gremios sindicales.

En una declaración en el Palacio de Gobierno de Lima, García reiteró que está con la mayoría de la población insatisfecha que, pese a su descontento, salió a trabajar e hizo caso omiso a la paralización convocada por la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP).

El jefe de Estado prometió hacer "lo máximo por que la crisis internacional no golpee (a su país) como al resto del mundo", donde la inflación se ha disparado, en casos como el de China, hasta el 10 por ciento.

El mandatario enfatizó que, según todas las informaciones recibidas hasta el momento, "la población no tenía ni tiene voluntad de paro, de detener al país paralizando las actividades productivas".

Diferencias entre manifestantes
El Ministerio del Interior ha informado de más de 200 detenidos por disturbios y sólo en la ciudad amazónica de Puerto Maldonado se ha registrado un acto masivo de violencia, que llevó a la quema de la sede del gobierno regional.

García felicitó a los transportistas, a los trabajadores públicos y privados, y a los obreros de construcción civil que, casi en su totalidad, han seguido trabajando.

También sumó en su saludo a "los agricultores y campesinos que desde ayer están demostrando que no están a favor de paralizaciones, actos de violencia, bloqueos o huelga".

El jefe de Estado expresó que podía diferenciar "muy claramente" entre "la agitación política de los que quieren ganar algo políticamente y llegan a hacer actos de violencia", y los que tienen razones para estar insatisfechos por el alza de los precios de los alimentos y los combustibles.

"Éstas son las circunstancias del mercado mundial y nosotros haremos todo lo posible por aminorar el impacto que estos temas traen a los más humildes y trabajadores", reiteró el gobernante en presencia de su consejo de ministros.

"Éste ha sido un día en que no respondemos con triunfalismos, hay una queja tal vez en el 60 por ciento de la población e intentaremos hacer lo máximo posible", reafirmó García.