Isabeli es la inspiración latina
Belleza que va con inteligencia, serenidad y profesionalismo. Es una estrella de la moda mundial.
Tres años después de haber participado tímidamente en un concurso de modelaje en su país, Isabeli Fontana ya se estaba titulando como supermodelo al desfilar para una legendaria marca de ropa interior. A esta brasileña, nacida en Curitiba, le basta una extensa selección de reggae, agua, café y buena vibra para entregarlo todo, en la pasarela o ante las luces de un estudio.
Es la nueva imagen de campaña de la firma Leonisa.
¿Qué circunstancias jugaron para que se convirtiera en modelo?
"Yo empecé en 1996 en un concurso de modelaje cuando tenía 13 años. Ese concurso fue como un juego para mí. Era una niña, simplemente pensé en divertirme, nunca en que podría tener un futuro. Quedé en tercer lugar en esa ocasión pero resulta que desde ese momento nunca he dejado de trabajar, a un contrato le siguió otro y otro...".
¿Quería ser modelo, o cuáles eran sus sueños entonces?
"Soñaba con ser veterinaria. Amo los animales y siempre he tenido mascotas. En este momento tengo tres perros y un pájaro".
¿Qué tipo de ambiente prefiere para modelar, una pasarela o una sesión de fotos...?
"Cualquiera de los dos, siempre y cuando sea divertido. También depende de la gente con la que uno trabaja, a veces puede ser un evento bellísimo y un gran show, pero si no me siento contenta y divertida no será cómodo para mí. El objetivo es siempre estar feliz para disfrutar el trabajo que hago".
¿Y a qué se refiere cuando habla de eventos en los
que no se divierte?
"Hay desfiles que son muy tensionantes y los odio, me gusta estar relajada, divertirme mientras trabajo. Estamos viviendo, la vida es una sola y la meta es sentirse bien en el trabajo y en todas partes".
¿Cómo describe el mundo actual del modelaje?
"Ha cambiado mucho desde que empecé. Antes era difícil y muy tenso. En estos días el trabajo digital permite que estés más tranquila y una vez se hace la foto que uno quiere pasa a la siguiente. El esfuerzo que se requería para lograr una foto perfecta se reflejaba en el resultado, ahora es mucho más fácil. Todavía me gusta mucho trabajar fotografías en película porque hay una mayor exigencia creativa, pero la industria sigue evolucionando, el futuro es hoy".
¿Qué se siente que a uno le digan que es supermodelo?
"Creo que soy una persona muy simple. No vivo como una modelo, la vivo como una persona normal".
¿Su rutina de belleza diaria?
Es muy sencillo, no hago nada especial. Creo que lo que más me aporta es el masaje, realmente no me fijo mucho en el maquillaje o el pelo, pero un buen masaje sí que me ayuda. Maquillaje y pelo solo me interesan cuando tengo un trabajo, de resto lo que hago es comer muy sano y hacer ejercicio, primero la salud".
¿Cuántas horas al día
pasa en el gimnasio?
"Depende de lo que tenga en el día varía mucho, pero es claro que el ejercicio y el masaje me ayudan a aliviar el estrés y sentirme más bella, esa belleza sale de adentro"
¿Cómo vive el tiempo libre?
"En el campo. Me gustan las actividades al aire libre, practico tabla de vela y para calmarme simplemente estoy en la playa, mirando el mar, leyendo".
Muchas adolescentes quieren buscar un futuro en el modelaje ¿qué consejo les daría?
"Que no actúen demasiado, que sean muy naturales, eso es lo que está buscando el modelaje hoy en día. Y también es útil bloquear el riesgo que hay en este negocio, se deben saber proteger, hay que confiar en los instintos: si sienten que algo que les ofrecen no está bien, entonces no lo hagan. Cuando sentía que tenía un riesgo yo oraba para obtener protección".
¿Y la familia?
"Mi vida son mis dos hijos, el mayor va a cumplir diez años y el menor tiene seis. Los tuve cuando estaba muy joven y era muy vulnerable. Están en la escuela y me complace mucho saber que tienen una vida normal".