Histórico

Ismael Serrano, comprometido con la realidad

El cantautor español, heredero de las letras con sentido, estará en Medellín el próximo 10 de agosto. Viene a cantar los temas de su nuevo trabajo Todo empieza y todo acaba en ti.

29 de julio de 2013

"Lo más bonito es subirse al escenario y sentirse acompañado por gente que conoce tus canciones".

Reconocido como el principal exponente de la nueva generación de cantautores españoles, Ismael Serrano parece ser el heredero del legado de Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina y Luis Eduardo Aute

Llega con un nuevo trabajo discográfico, Todo empieza y todo acaba en ti, que sin mucha publicidad ha logrado Discos de Oro por sus ventas en Argentina y España, mientras que en Colombia, poco a poco, ha logrado cultivar un buen número de seguidores. El 10 de agosto estará en Medellín.

¿Cómo ha sido el desarrollo de esta nueva gira de conciertos por América Latina?
"Feliz de ir visitando y conociendo América Latina a la que siempre es un placer volver, más aún cuando se llega con un nuevo manojo de canciones, lo que te genera una gran ilusión, en especial con un disco que me ha permitido cumplir algunos de mis grandes sueños".

¿Esos sueños son los duetos que incluyó en su nuevo álbum?
"Una de las cosas que me ha permitido Todo empieza y todo acaba en ti, es compartir mi música con gente que he admirado toda mi vida, que en cierto modo es responsable que a mí me diera un día por tomar la guitarra e intentar hacer canciones. Con Joan Manuel Serrat y Silvio Rodríguez ha sido un placer, un honor y un total aprendizaje, porque siempre he admirado su música, pero ahora meterse en la intimidad del artista y ver cómo hace lo que tanto admiras que hace, no tiene precio.

¿Cómo ha visto el impacto de este disco?
"Estoy feliz porque soy consciente del privilegio en el que vivo, porque lograr ser Disco de Oro cuando no se venden discos y menos de álbumes de cantautores que no suelen difundirse por la radio comercial, es una bendición.

Esto nos ha permitido en España hacer una gira bastante larga e intensa por todo el país, que antes no habíamos logrado".

En su caso, ¿el compositor sale de gira o sólo el intérprete?
"Los viajes son muy inspiradores. Además, cuando son muy extensas, ya te dan ganas de volver a tomar la guitarra y esperar a ver qué nuevo va saliendo. Un disco se empieza a componer cuando terminas de grabar el anterior, con esas pequeñas ideas que van llegando a ti y no sabes a dónde te van a llevar, pero que poco a poco empiezan a tener cuerpo y se pueden convertir en canciones.

Los viajes son la esencia de un cantautor, que no puede perder lo nómada".

¿América Latina lo inspira?
"Cuando realizo viajes siempre tomo apuntes, quizás no salgan canciones completas, pero sí elementos que luego van a ser detonantes para canciones futuras, pero no hay que apurarlas.

Eso sí, aunque sea difícil, lo ideal es no sentir que estás de paso por los lugares, en modo turista, sino involucrarte con el día a día de la ciudad o población que visitas, aunque muchas veces es difícil porque las giras imponen un ritmo frenético que no te deja ver dónde estás, pero estás en la lucha".

¿Cómo ha sido la relación con el público colombiano?
"Es una relación que de cierto modo comenzó hace mucho, como ha ocurrido desde 1997 con América Latina, donde paso a paso hemos ido encontrándonos con más personas a través de la música, y desde un par de discos anteriores se ha dado con Colombia.

Hemos realizado un par de presentaciones y ahora ha sido una sorpresa porque los discos no llegan, porque su difusión es más complicada que cualquier otro disco, porque la propuesta de un cantautor es una música que defiende la poesía".

¿Cómo ve el panorama de la música en la actualidad?
"En los últimos años ha tenido otros intereses por ser desarrollada como objeto de consumo y no como pieza artística, que no es consumo inmediato. En todo esto se pierde la calma que requiere una canción que defiende la palabra, la poesía".

¿Poco espacio para la poesía en la música de hoy?
"Hemos perdido la capacidad de verlo porque todo nos ha llevado a ser espectadores de todo lo que nos rodea y no protagonistas de este mundo, como si el destino estuviera escrito contra nuestra voluntad y estuviéramos resignados a vivir lo que nos dictan.

Eso le ha quitado la magia y la épica a nuestras vidas, y es quizás lo que me ha atraído de cantautores como Serrat o Silvio Rodríguez que he han hecho sentir un héroe al narrar pequeñas grandes historias cargadas de una intensa poesía, lo que es muy emocionante".