Yukio Hatoyama es el nuevo primer ministro de Japón
El líder de oposición Yukio Hatoyama fue elegido primer ministro este miércoles e instauró su gabinete con la promesa de impulsar la economía japonesa y reformar el gobierno con su partido de centroizquierda tras más de 50 años de un mandato conservador casi ininterrumpido.
La victoria de Hatoyama señala un importante momento de cambio en Japón, que enfrenta su peor desaceleración económica desde la Segunda Guerra Mundial, mientras que el desempleo alcanza sus niveles más altos y la deflación se intensifica. Pero los temores sobre la capacidad para gobernar del grupo opositor son intensos.
Hatoyama prometió reducir el derroche en el gobierno, ordenar la burocracia nacional y restaurar la economía por medio de frenos a los aumentos fiscales programados, el retiro de cobros en las carreteras y la atención a las políticas sobre el consumidor, y no sobre las grandes empresas.
También se comprometió a mejorar las relaciones de Tokio, no siempre positivas, con sus vecinos asiáticos y a conformar políticas exteriores más independientes de Washington.
"Me emociona la posibilidad de cambiar la historia", dijo Hatoyama. "La batalla comienza ahora".
El nuevo primer ministro dijo que quería construir "una relación de confianza" con el presidente estadounidense Barack Obama, intercambiando opiniones "con franqueza".
Su elección
El parlamento había acordado en una sesión especial elegir formalmente a Hatoyama, cuyo Partido Demócrata de Japón se impuso en las elecciones parlamentarias del mes pasado obteniendo el control de la cámara baja. La cámara baja es la encargada de elegir al primer ministro.
El partido de Hatoyama ganó 308 de los 480 escaños en la cámara baja, lo que llevó a la salida del primer ministro Taro Aso del Partido Liberal Demócrata, de tendencia conservadora y a favor de Estados Unidos.
Este miércoles en una votación parlamentaria para elegir al primer ministro, Hatoyama ganó 327 de 480 votos de la cámara baja. Le hubiera bastado una mayoría simple de 241 votos.
Hatoyama, que se doctoró en la universidad estadounidense de Stanford, es el nieto de un primer ministro conservador. Sus opciones para conformar el gabinete eran limitadas, su partido fue creado hace una década y nunca había estado en el poder, además de que casi la mitad de los demócratas integrantes de la cámara baja cumplirán apenas su primer periodo en el parlamento.
Dificultades
El gobierno de Hatoyama enfrenta también grandes dificultades con las que tendrán que lidiar rápidamente.
Aunque la economía de Japón ha mostrado algunos signos de mejoramiento, aún está muy afectada por la crisis financiera mundial y el desempleo que alcanzó la cifra sin precedentes de 5,7 por ciento. El envejecimiento rápido de la población amenaza con ser un obstáculo para los fondos públicos pues el número de contribuyentes decrece y el de los pensionistas se dispara.
"Quiero que la gente sienta que su poder adquisitivo mejora, aun un poquito, lo antes posible", dijo Hatoyama en una conferencia de prensa.
Hatoyama también tendrá una prueba en el frente diplomático. Ha dicho que quiere asistir a la Asamblea General en Naciones Unidas en Nueva York la próxima semana y reunirse posiblemente con el presidente Obama.