Las otras lecturas del PIB
Luego de que 2007 fue el año con el mayor crecimiento en décadas, 8,0 por ciento anual, los datos dados a conocer ayer por el Dane, el país parece no asimilar ni ponderar con juicio, las nuevas cifras de crecimiento y asigna responsabilidades por la desaceleración de la economía que no se ajustan a la realidad de los números. Creemos que lo mejor es ir a los porcentajes y mirar con detalle la gráfica adjunta, que es un buen apoyo para este ejercicio.
El Producto Interno Bruto, PIB, se mide estableciendo el valor agregado de toda la economía. Para efectos estadísticos se establece una cifra base de medición que actualmente es 100 para el año 2000. De allí en adelante, trimestre a trimestre se estima el valor agregado generado por la economía del país; a finales de 2006 fue de 132,27 y de 2007 fue de 142,85.
La sorpresa inquietante es que en el primer trimestre de 2008 el valor del PIB medido con este índice fue de 142,85, según el dato ajustado por el Dane, lo que mostró por primera vez un decrecimiento intertrimestral desde marzo de 2002 del 0,2 por ciento. En ese momento señalamos en editorial que podíamos estar ad portas de una recesión.
Afortunadamente, el índice del segundo trimestre del año se ubicó en 143,51, lo que da un crecimiento interanual del 3,66 por ciento y del 0,65 intertrimestral. Esto es importante y muestra un cambio, que es positivo, de tendencia en las cifras.
Una cifra fundamental sobre la que hay que hacer claridad necesaria es la del consumo de los hogares. Es un hecho elocuente que esta no ha decrecido en ningún trimestre en los últimos tres años. Aducir que el aumento de la tasa de interés explica la desaceleración no es correcto y conduce a decisiones e interpretaciones erradas. Lo que sí es cierto, es que el consumo de las familias se desaceleró, especialmente en el último trimestre, y específicamente en bienes durables, pero el total del consumo no ha decrecido y se observa perfectamente en el gráfico.
La explicación del decrecimiento del primer trimestre y luego de la pequeña recuperación del segundo está en las cifras de inversión. Uno de sus renglones, la construcción de obras civiles cayó 28 por ciento del último trimestre del año anterior al primero de este año. En el último trimestre se recuperó y volvió a los mismos niveles de actividad que traía antes del pico de cierre de los periodos de alcaldía y gobernación.
El rubro de inversión que sigue descendiendo es el de equipo de transporte, que cayó el último trimestre cerca del 11 por ciento. El Gobierno Nacional en lugar de asignar responsabilidades por la tasa de interés debe revisar el efecto de las medidas que toma, como la restricción a la inversión en camiones.
Esperamos que la economía retome su senda de crecimiento, el cual será de todas formas menor este año, pero tiene a favor una dinámica exportadora muy importante que ha logrado compensar la revaluación del primer trimestre. Allí está el motor del crecimiento.