Libertad de prensa, silenciada en marcha obrera
Como un acto contra la libertad de expresión calificó la APA la detención del reportero Esteban Vanegas.
Una detención ilegal y una flagrante violación a la libertad de expresión, así calificó la Asociación de Periodismo de Antioquia (APA) la aprehensión del reportero gráfico Esteban Vanegas Londoño, durante su cubrimiento de la marcha del Día del Trabajo en Medellín.
Vanegas, miembro de la Casa Editorial El Colombiano, fue conducido al búnker de la Fiscalía con la intención de judicializarlo por el presunto delito de agresión contra servidor público.
El general José Ángel Mendoza, comandante de la Policía Metropolitana, señaló que la marcha transcurrió con tranquilidad hasta el mediodía, cuando sobre la avenida Oriental, a la altura del comando de la Institución, comenzaron los desmanes.
Narró que un grupo de encapuchados causó daños en fachadas e inmobiliario público, en especial contra 11 paraderos de buses, lo que obligó a la intervención del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad).
Tal respuesta provocó la huida y persecución de los marchantes. Precisó que en el pleito hubo un oficial y siete subalternos lesionados, con incapacidades de dos a cinco días. Una de las agentes lesionadas reconoció a su agresor, quien fue retenido.
En medio de los choques, añadió el alto oficial, 15 personas fueron conducidas por supuestos actos vandálicos y agresiones a funcionarios públicos, "entre ellos un joven periodista de un medio de comunicación de la ciudad".
Jorge Oquendo, camarógrafo de Hora 13 Noticias y testigo presencial, comentó que un encapuchado con buzo negro arrojó un palo a los uniformados y emprendió la fuga en dirección al Parque San Antonio, hacia una columna de concreto en la que estaba Vanegas, vistiendo también una camiseta negra.
"En ese momento corté la grabación y corrí al sitio. Al llegar me sorprendió que tenían retenido al periodista de El Colombiano", precisó.
El encapuchado cayó al suelo y fue sometido por varios policías. Ese instante fue fotografiado por Vanegas, situación que enardeció a los servidores públicos.
El video de Oquendo muestra cómo el comunicador fue rodeado por cinco efectivos dotados de escudos y bastones, y uno de ellos lo agarró desde atrás por el cuello. No valieron sus súplicas, afirmando que era reportero de esta casa editorial y enseñando su cámara fotográfica.
Los funcionarios lo llevaron a la fuerza hasta una tanqueta, y los videos muestran que Vanegas no opuso resistencia. Mas él no fue el único reportero afectado durante la marcha.
Sebastián Carvajal, videógrafo de El Colombiano y quien acompañaba a Vanegas en sus labores, relató: "Estábamos en el cubrimiento de la marcha, nos tocó ver cómo algunos policías emboscaron a los estudiantes con pistolas de paintball, y al ellos vernos, se nos vinieron encima y nos agredieron, nos pegaron, nos explotaron las bombas de aturdimiento encima y se llevaron a uno de los compañeros".
En esa acción también resultó golpeado el periodista Juan Fernando Rojas, de El Colombiano, y con laceraciones Andrea Torres, de Q"Hubo, cuando fue empujada por un uniformado en el instante que quiso ayudar a Vanegas.
Raúl Arboleda, fotógrafo de la agencia noticiosa AFP, contó que 10 minutos antes de la detención del colega, estaba en el cruce de la Playa con la Oriental, cuando fue interceptado por un agente a bordo de una moto oficial. "Me quería detener, pero junto a mí había un funcionario de Derechos Humanos. El patrullero estaba encapuchado y dijo que la orden que les habían dado sus jefes era decomisar y destruir todas las cámaras. Como prueba nos puso su radio, donde se oía una voz dando esa orden".
Piden acelerar investigación
La Alcaldía de Medellín, a través de un comunicado, solicitó a la Fiscalía que "avance rápidamente en la investigación y se aclare lo sucedido entre un integrante de la Policía Metropolitana y el fotógrafo".
Añadió que "respetamos cualquier tipo de manifestación pacífica que propenda por los derechos humanos, la libertad de prensa y la labor de quienes ejercen periodismo".
Sin embargo, horas antes de la publicación del comunicado, la Secretaría de Seguridad reportó en su cuenta de Twitter: "Fotógrafo de @QHuboMedallo @elcolombiano fue detenido por agresión en vía pública a la @PoliciaMedellin puesto a disposición de la fiscalía (SIC)" y "Detención de fotógrafo no fue por impedir el ejercicio de su profesión".
El titular de ese despacho, Iván Darío Sánchez, declaró que, según la información que él tenía, el fotógrafo "agredió a un policía en la marcha, emprendió la huida y unas cuadras más adelante es capturado por la Fuerza Pública".
El general Rodolfo Palomino, director de la Policía, lamentó el incidente y agregó que "está en manos de la Fiscalía lograr la claridad de lo ocurrido".
El personero de Medellín, Rodrigo Ardila, dijo que en su oficina se iniciaron indagaciones sobre la actuación de los uniformados en este caso y criticó que la marcha hubiese terminado en disturbios.
La directora de esta casa editorial, Martha Ortiz, afirmó: "Como directora de un medio informativo lamento mucho que Colombia tenga hoy un periodista detenido por ejercer su labor. Como directora de El Colombiano he asumido este caso personalmente, para que el respeto por la libertad de prensa nunca falte en el país y porque el fotógrafo Esteban Vanegas es un reconocido profesional, miembro del gran equipo de esta casa periodística".
La Fundación para la Libertad de Prensa (Flip) recordó que "sustraer sin motivo a periodistas del espacio noticioso es ilegal y acarrea sanciones".
La APA hizo un llamado a las autoridades para que respeten la labor periodística, "pues en juego no solo están los derechos de los reporteros, sino los derechos que tienen los ciudadanos a ser informados", y exigió a la Policía "cesar toda acción legal en contra del reportero".
Al cierre de esta edición, Vanegas seguía detenido en el búnker de la Fiscalía, esperando resolver su situación.