Manizales le pone alma al Mundial
TIENE LISTA SU cancha, pero apenas inició otras obras. Cumplirán, no hay temor. Segundo informe de EL COLOMBIANO.
La fábrica de atardeceres, como describió Pablo Neruda a Manizales, busca proyectarse aún más a costillas del fútbol. El Mundial sub20, del cual será subsede entre julio y agosto de 2011, se mira como una inmejorable oportunidad de progreso por parte de sus autoridades y ciudadanía.
No en vano la inversión cercana a los 11 mil millones de pesos en obras de infraestructura, pues allí saben los altos beneficios turísticos y económicos que representa un certamen de esta magnitud, como sucedió con la Copa Libertadores de América 2004.
Cuentan que, desde esa época, la presencia de extranjeros, especialmente de México y del sur de continente, se incrementó notoriamente, atraídos por el Nevado del Ruiz, los termales y toda su geografía. El secretario de Deportes y Recreación de Manizales, Carlos Arturo Buriticá, aseguró que "después de la Copa la historia turística de Manizales se partió en dos".
El Festival Internacional de teatro y la Feria anual con toros y reinas, además de la belleza de sus mujeres, son otros atractivos para los forasteros que disfrutan del clima y la calidez de los habitantes de esta ciudad universitaria.
En relación con Cali, Pereira, Medellín, Barranquilla y Cartagena la inversión económica para el Mundial juvenil puede sonar baja, pero es que allí tienen la fortuna de que el estadio Palogrande es relativamente nuevo: 16 años. Además, para la Copa América de 2001 y el Suramericano juvenil de 2005 recibió refacciones.
Volvió el Once
La cancha fue habilitada hace 15 días para que el Once Caldas pudiera jugar los partidos del campeonato colombiano, puesto que apenas fue necesario cambiar el 40 por ciento de la grama (kikuyu) para cumplir con las exigencias de la Federación Internacional de Fútbol Asociado -Fifa-.
El 5 de agosto comenzaron los trabajos de remodelación, que incluye la instalación de sillas en todas las graderías, por lo cual se puede asegurar, tal como lo comprobó EL COLOMBIANO en su visita, que apenas van en un 20 o 30 por ciento, a lo máximo. Sin embargo, sus dirigentes aseguran que cumplirán con el cronograma y entregarán las obras en enero de 2011, porque el Mundial hace parte del proyecto denominado City Marketing , "lo que nos ha permitido mejorar nuestra infraestructura en todos los aspectos, mediante la realización de eventos deportivos", anota Buriticá.
El sistema vial, por ejemplo, se modernizó en los últimos años gracias a una partida de 13.800 millones de pesos. La cancha sintética auxiliar, "bautizada" Luis Fernando Montoya, costó $1.450 millones.
Como hormigas
Cerca de 40 obreros laboran sin descanso en el Palogrande en la ubicación de silletería, la construcción de dos camerinos para los equipos visitantes, dos para el local, uno para los árbitros y otro para los recogebolas. También construyen una zona mixta amplia, un espacio con césped sintético para el calentamiento de los futbolistas, un túnel para el ingreso de los equipos a la cancha, y mejoran los accesos para personas con alguna discapacidad.
La remodelación de todo el sistema de iluminación y sonido, la ubicación de dos pantallas gigantes y la adecuación de palcos y tribunas VIP para dirigentes de la Fifa y para la prensa, son tareas que apenas comenzaron.
Y aunque restan 301 días para que ruede la pelota en el Mundial sub20 de Colombia, en Manizales sus habitantes y autoridades responden que no hay dramas ni temores. Allí están listos para recibir uno de los principales grupos del Mundial tras frustrarse el sueño de hacer la final (será en Bogotá), y para mostrarle al mundo una ciudad pequeña en tamaño, pero grande en pujanza.