Medellín, ciudad de plancha
La música romántica es fuerte en Medellín. Los llenos de los conciertos en la Carpa Cabaret así lo confirman.
De la peluquería, atravesando la cocina de las mamás y de allí a las discotecas. La música romántica ha pasado por el salón de belleza, la mesa de planchar y hoy es fiesta. En la tierra del reguetón, la Maldita Primavera no deja de florecer.
Entre Medellín y el área metropolitana se pueden contar más de 50 establecimientos que se dedican a la música romántica, con algunos que solo ruedan música de los 60 y 70, hasta bares que tienen noches especiales para este género.
Esta semana estuvieron en Medellín Juan Gabriel, Ricardo Montaner, Gigliola Cinquetti, Marisela, Amanda Miguel y Tormenta, en diferentes conciertos en plena Feria de las Flores, mientras que en el último año llegaron Ángela Carrasco, José Vélez, Rudy Márquez, Miryam Hernández, Sergio Fachelli, Pimpinella y Buddy Richard, entre otros.
Un gusto masivo
Desde hace varios años, la emisora de música romántica está entre los primeros lugares. La Voz de Colombia Bésame fue la segunda en el último Estudio Continuo de Audiencia Radial (Ecar), con 229 mil oyentes, solo detrás de Olímpica (381,8), y delante de Radio Tiempo, otra que tiene en su rotación música del corazón con algunos años, y que en Antioquia reconocen como de "plancha" o "peluquería".
"Esta es una ciudad romántica y apasionada, por eso se mantiene viva la música y sus letras. Ser la única emisora especialista en este género nos da una ventaja, y algo que se ve que hace falta, pues desde que estamos en internet recibimos mensajes de muchas partes", sostiene Sandro Alberto Muñoz, director de la emisora.
Pero el amor salió hace muchos años de los hogares y la radio, y se metió a los bares, y no solo para adultos. "Hace más de cinco años hacemos los Miércoles de plancha que es nuestro mejor día. Son más de 200 personas que llegan a la discoteca, aunque cada vez el concepto tiene más rumba, pero es nuestro día de plancha", sostiene Sebastián Acosta, barman del B-Lounge, en El Poblado.
Andrés Alzate es un odontólogo que pasa las noches llevando plancha a domicilio. Con un par de video beams y torres de sonido como un concierto, tiene una empresa de videoplancha con varios años de experiencia.
"Creo que por lo románticos que somos los paisas, y la influencia de los años 70 y 80 de la música romántica. Hasta los jóvenes se están volviendo fanáticos y combinan reguetón con plancha", sostiene este empresario, que habla de una tendencia que cada vez crece más.
"La gente lo combina, escuchan plancha un rato y luego bailan reguetón y se terminan enrumbando otra vez con plancha", dice Alzate, algo en lo que coincide el barman del B-Lounge.
El género sigue vivo, pues como dice Sandro Alberto, "mientras haya gente enamorada, habrá música romántica".