Piamonte floreció en el Oriente
La humildad va sobre la bicicleta y está personalizada en Fredy Piamonte Rodríguez, el boyacense que ayer se tituló campeón de la Clásica de las Flores en Rionegro.
El corredor de 26 años de edad, natural de Aquitania, era todo felicidad en el sitio de concentración del equipo Une-Epm, pues por primera vez en nueve años de luchas en el ciclismo alcanzó la corona general de una competencia, hecho inusual en un gregario.
Había triunfado en etapas, pero hace rato buscaba la gloria y la consiguió con su esfuerzo personal en la contrarreloj del sábado y la colaboración del equipo, en el que los capos Ortega, Báez, Rincón y López fueron solidarios y muy profesionales. "Me devolvieron todo lo que yo les he aportado en otras ocasiones y estoy agradecido con ellos y con el técnico Raúl Mesa", narró entre risas el papá de Giselle Lorena, su niña de cuatro años, a quien le dedicó el logro.
Esa nena, dice, es la motivación más grande que tiene, así como su esposa Mayerli Chaparro, con quien se mudó hace 15 días para Sogamoso a emprender una nueva vida: "las exigencias de los entrenamientos prácticamente cambiaron todo y tuve que dejar el taller de bicicletas que tenía en el pueblo que me ayudaba para sobrevivir".
El segundo de la familia Piamonte Rodríguez, conformada por los padres, Álvaro y Ana Lucía, tres hermanos y una hermana, fue el único que prefirió el ciclismo al estudio, "a pesar de ser un deporte rudo".
Fredy también celebró que su escuadra haya iniciado la temporada con pie derecho y recordó que hace cuatro años representó al país en los Mundiales de ruta en Verona, Italia, donde ocupó la casilla 66.
Mientras agradece a Dios por las fuerzas que le da en cada pedalazo, Piamonte sueña con grandes hazañas en el pelotón mundial. No le importa que sea como coequipero con tal de escribir un nombre importante como lo han hecho muchos de sus compatriotas.
El conjunto de Raúl Mesa, con Piamonte dichoso y estrenando corona, seguía concentrado ayer en el Oriente antioqueño y hoy partirá hacia el Valle para asistir a la vuelta de ese departamento, donde defenderá el título que hace un año logró Giovanni Báez.
Mesa destacó la actuación colectiva y en especial el desempeño de uno de sus peones (Piamonte), en una competencia que calificó de difícil "por la calidad de los rivales y que se definió en la prueba contra el reloj". En la Clásica se inscribieron 128 ruteros.
Por lo pronto, todo el ramillete de flores es para Piamonte.