Histórico

por cuidarnos este fin de año

Este es un sentido agradecimiento a aquellos que nos cuidaron mientras la fiesta llegaba a las familias colombianas.

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01 de enero de 2013

Su trabajo no pasa desapercibido. Los colombianos nos sentimos orgullosos cuando salimos a las carreteras y vemos al personal del Ejército que nos levanta el pulgar en señal de saludo y deseos de buen viaje.

Sabemos que tienen familia, que tal vez sus hijos los están esperando para abrazarlos y una rica cena en unión de sus queridos se les enfría en la casa.

Gracias a personas como Byron de Jesús Villa y Héctor Roa, personal de seguridad de una institución privada, podemos desplazarnos sintiéndonos seguros.

"El día se me hizo muy largo, pero si yo no hiciera con amor mi trabajo, llegaría tomado a mi turno del día siguiente", dijo Roa sabiendo que su labor es proteger a una empresa que se lo ha dado todo.

La familia de Héctor lo esperaba con un asado, calientico, hecho especialmente para la fecha de Año Nuevo. Él fue un par de horas a su casa, abrazó a sus seres queridos y se devolvió a la portería en la que lo aguardaba la noche pintada con juegos pirotécnicos.

Tal vez los mismo colores que Carolina Córdoba vio desde Tarso, mientras cumplía su turno de 24 horas como médica en el hospital de ese municipio.

"Es mi profesión, la amo", replica ella sabiendo que sus ojos se cierran por el cansancio. Su celular sonó durante toda la noche del 31 para atender emergencias. Así saludó el año que comienza, en el que tal vez no tendrá muchos días de descanso pero sí la satisfacción del deber cumplido.

A todas esas personas que se esfuerzan y sacrifican el tiempo con sus familias les agradecemos de corazón. Son ustedes los héroes de nuestras casas, pues indirectamente entran hasta ellas cuando podemos estar tranquilos después de un largo viaje, al que muchos se someten para estar a tiempo con los más queridos y celebrar las fiestas de fin de año.

Ustedes, señores bomberos, enfermeras, médicos, vigilantes, policías, soldados, pilotos y resto de personal que ejerce trabajos que no saben de fiestas, son la razón de este país, funcionamos en gran parte por sus intachables labores y les agradecemos con el alma entera.

Feliz año desde El Colombiano, que 2013 esté lleno de amor pues con ese sentimiento lo lograremos todo.