Real Madrid es el rey
Los merengues celebran otro título de cuenta del Barcelona, que extiende su crisis.
Una genialidad de Gareth Bale puso a celebrar otra vez al Real Madrid y ahondó la crisis del Barcelona, que con el 2-1 de ayer ajustó tres caídas consecutivas por torneos diferentes.
El galés justificó, con su anotación a los 86 minutos, los 101 millones de euros que costó su pase y se confabuló con el argentino Ángel Di María (abrió el marcador a los 11) para convertir otra vez al equipo merengue en campeón de la mítica Copa del Rey de España, que nació en 1903.
Con la corona 19 en el certamen el conjunto blanco, que orienta el italiano Carlo Ancelloti y que no tuvo en la cancha de Mestalla al portugués Cristiano Ronaldo por lesión, ratifica el buen momento que también lo tiene vivo en la Liga ibérica y en la Champions.
Mientras Lionel Messi, Andrés Iniesta y Neymar trataban de salir de apuros y se alcanzaban a ilusionar con la remontada, luego de la igualdad de Marc Bartra (68"), Bale los sorprendió y con el gol que significó el nuevo título se convirtió en el nuevo Príncipe de Gales para la afición madridista que volvió a festejar en la plaza de Cibeles de cuenta de los azulgrana que viven un abril de pesadillas.
Hasta en las reacciones predominaron los contrastes entre los clubes más grandes de España. La prueba está en que mientras Ancelloti resaltó en AS.com que estaba feliz por haber ganado "un título merecido", Tata Martino admitió que sintió "un profundo dolor" por la derrota y aseguró que Barcelona "tiene futuro" y que su continuidad no dependía de la final de la Copa del Rey, que tenía como campeón al Atlético.