Roma se tiñó de blanco por una nevada inusual
Una intensa nevada cayó ayer desde las primeras horas de la mañana sobre Roma y se acumuló en las calles y carreteras del centro histórico de la capital italiana, lo que no ocurría desde 1986.
En pocas horas, un manto de nieve de algunos centímetros cubrió los principales monumentos de la capital, como el Coliseo, la Fontana de Trevi, la Plaza Navona, y la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.
Incluso, se dijo que el Papa Benedicto XVI se asomó a la ventana para ver la nevada más intensa en la ciudad eterna en casi un cuarto de siglo.
En Roma no nevaba desde hace cinco años, cuando en la madrugada del 27 de enero de 2005 cayeron algunos copos, pero hay que remontarse al 11 de febrero de 1986 para recordar cuando Roma se despertó con una decena de centímetros de nieve en sus calles del centro.
Los ciudadanos vivieron una jornada difícil debido al tráfico, ya que muchas líneas de autobús fueron suspendidas ante la imposibilidad de circular, mientras que los turistas disfrutan del sugestivo panorama de una Roma completamente nevada.
"Estoy muy emocionada. He estado tomando fotos frente al Coliseo porque pensé que nadie me creería si les decía que estaba nevando en Roma hoy", dijo Margaret Jones, una turista londinense.
Fuertes lluvias, nieve e intensos vientos se presentaron en el centro y sur de Italia, lo que obligó a cerrar carreteras en varias zonas y algunos colegios en la isla de Cerdeña.
En Roma, el aeropuerto de Ciampino quedó cerrado y los vuelos fueron desviados a Fiumicino, de mayor tamaño, mientras que el tráfico habitualmente caótico de la ciudad fue más lento de lo habitual en muchas zonas.
"Es bonito, pero no estamos acostumbrados en Roma", dijo el conductor Mario Strillandi.
Washington, golpeada de frío
Pero si en Roma la postal de la nieve fue algo no visto desde hace más de dos décadas, en la costa este de Estados Unidos sufren la inclemencia de temporales de nieve que han llegado a niveles históricos.
Washington rompió su récord de nieve de 1898, cuando se comenzó a documentar este tipo de precipitaciones.
En lo que va de este invierno, la capital estadounidense ha registrado un total de 139,4 centímetros de nieve, comparado con el anterior récord de 138,2 centímetros del invierno entre 1898 y 1899, según datos oficiales.
La gran mayoría de escuelas cerraron, edificios públicos enviaron a los funcionarios a las casas y se espera que para mañana o el lunes sea aún más difícil retomar la rutina de la ciudad por una nueva tormenta.