SIN EL PAN Y SIN EL QUESO
"Sin el pan y sin el queso", como reza el refrán popular, fue lo que le aconteció a Colombia en materia diplomática en las últimas semanas.
En el caso de las aspiraciones oficiales del vicepresidente Angelino Garzón para dirigir la Organización Internacional del Trabajo; y en las personales de José Antonio Ocampo Gaviria , para ocupar la presidencia del Banco Mundial, respectivamente, el país quedó haciendo el oso.
En verdad, el Gobierno colombiano hizo una mala jugada, al no respaldar a Ocampo en el BM, pero sí a Angelino en la OIT.
Por diversos motivos, el Vicepresidente colombiano, como lo vaticinaron algunos comentaristas en no pocos informes periodísticos nacionales e internacionales, no logró la requerida votación para ascender al cargo más importante en la OIT y se consoló al decir que Colombia había resultado decisiva para la escogencia de Guy Ryder.
La lección para Colombia está clara cuando ahora Ryder se convirtió en el nuevo director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y es el primero en la historia de esta institución en ser " promovido por los sindicatos y no por un gobierno"....