Una mano a los de San Isidro

A pesar de que debieron evacuar apresuradamente por el riesgo en que estaban sus casas, que con tanto sudor y sufrimiento lograron levantar, lo único que los hizo sentir mal fue tener que pasar la noche en un lugar extraño.

Desde que se presentó la emergencia, las 12 familias que tuvieron que evacuar han tenido el acompañamiento necesario de la Administración Municipal de Sabaneta.

Aunque el problema de desestabilización se había evidenciado hace mucho tiempo y ya hace cuatro años un deslizamiento había cobrado la vida de una menor, el pasado miércoles se volvieron a prender las alarmas.

Ese día en la mañana la comunidad del barrio San Isidro se percató de un agrietamiento en la vía de ingreso e inmediatamente alertó al Clopad de Sabaneta.

Funcionarios del Municipio fueron al lugar e iniciaron un chequeo periódico que evidenció un aumento de las grietas, por lo que se recomendó desalojar 12 viviendas que corrían peligro.

Lo primero que se hizo fue buscarles un alojamiento temporal donde pudieran pasar la noche para lo que se habilitaron los salones de sedes de Acciones Comunales.

Claro que no podía faltar el mosco en la sopa. Una persona del barrio Aliadas que tomó la vocería de la comunidad no permitió que una familia se alojara en el salón de la sede comunal argumentando que para ellos era más importante una serie de eventos que tenían programados.

"Había parte de la comunidad que nos apoyaba pero otra que se oponía y no nos quisieron dejar entrar. A las siete de la noche nos sacaron", cuenta Olman Humberto Hurtado, cabeza de la familia.

Debido a esto la familia tuvo que ser reubicada en otra propiedad del Municipio, la Finca San Carlos, pero donde solo se les pudo facilitar una habitación en la cual se tuvieron que acomodar los ocho miembros de esta familia.

Según Nubeida Escobar, secretaria de Obras Públicas de Sabaneta, todas estas familias estarán en estos alojamientos provisionales mientras que consiguen casas en arrendamiento, que será subsidiado por el Municipio.

Ya incluso Rosiris Pabón ayer en la mañana estaba ubicada con sus hijos y madre en una casa arrendada en la Unidad Residencial Prados de Sabaneta, pero como dice ella "esto es muy triste porque no es lo mismo hoy estar en tu casa y amanecer en otra".

Como es una evacuación definitiva, afirma Nubeida Escobar, todas podrán acceder al programa general de vivienda de esta administración, incluidos otros cuatro hogares que se vieron afectadas con un problema similar acontecido hace unos meses en el mismo sector.

Señala la funcionaria que ya se inició un proceso de negociación para adquirir un predio cercano en donde se desarrollará un programa de vivienda para estas familias para que así no tengan que salir de su entorno.

Incluso se está haciendo una evaluación general del sector para determinar si hay más casas en riesgo y dar una solución definitiva.