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Biden y su ambiciosa propuesta migratoria

El nuevo presidente de Estados Unidos busca garantizar sus derechos. Aquí le explicamos cómo.

28 de enero de 2021

La primera semana de Joe Biden en la Casa Blanca pasó plagada de decisiones y simbolismos. 37 ordenes ejecutivas de temas tan diversos como la respuesta inmediata a la crisis sanitaria que vive Estados Unidos por el covid, hasta la suspensión de la construcción del muro en la frontera con México. Entre el mar de firmas y actos, promesas. Y entre ellas, una que cumple el sueño de 11 millones de indocumentados: la ciudadanía.

En ese camino para buscar su protección, sin embargo, hay tropiezos. Un juez federal en Texas bloqueó ayer temporalmente la medida de Biden, por la que se suspendía la deportación de migrantes indocumentados por un periodo de cien días.

El fiscal general de Texas, el republicano Ken Paxton, presentó una demanda contra la decisión de Biden la pasada semana al considerar que la nueva Administración actuó de forma arbitraria al no consultar la orden ejecutiva previamente con el estado.

El magistrado Drew B. Tipton del Tribunal de Distrito Sur de Texas detuvo la implementación a nivel nacional de la orden dada por Biden el mismo día que asumió el poder, el pasado 20 de enero.

“Prohibo la implementación y cumplimiento de las pólizas descritas en el memorando del 20 de enero titulado 'Pausa Inmediata de Cien Días de Expulsiones'", dice la orden dada ayer.

Cabe recordar que en su primer día en la Casa Blanca, Biden firmó una serie de medidas ejecutivas, varias de ellas en materia migratoria y una de las cuales era esta moratoria en las deportaciones "de ciertos no ciudadanos cuya deportación haya sido ordenada" para garantizar que Estados Unidos tenga un sistema migratorio justo y eficaz.

El juez Drew B. Tipton ya había pedido este lunes al Gobierno información sobre cuántos inmigrantes habían sido puestos en libertad como consecuencia de esta suspensión de las deportaciones.

En un mensaje en su cuenta de Twitter, Paxton celebró la victoria, resaltando que "Texas es el PRIMER Estado de la nación en presentar una demanda contra la Administración de Biden. Y GANAMOS".

Paxton, conocido por retar varias veces los programas de inmigración de los demócratas e impulsar una petición para que el Tribunal Supremo impidiera la certificación de la victoria electoral de Biden, se congratuló del fallo judicial: "Dentro de los 6 días posteriores a la toma de posesión de Biden, Texas DETUVO su congelación de deportación. Esto fue una insurrección sediciosa de izquierda. Y mi equipo y yo lo detuvimos", concluyó.

Tipton, un juez designado por el expresidente Donald Trump, programó una audiencia para el 28 de enero, cuando ambas partes deberán explicar sus argumentos.

"La acción del Gobierno viola la Constitución, las leyes migratorias federales y el convenio contractual entre Texas y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés)", por el cual el Gobierno debía exponer sus planes al estado, señalaba la demanda ante el Tribunal de Distrito del Sur de Texas. La orden de Tipton puede permanecer en vigor hasta 14 días y puede extenderse otros 14 días.

La ONG Unión Americana de Libertades Civiles había presentado un escrito a favor de la medida tomada por el Gobierno Biden, pidiendo al tribunal que rechazara la solicitud. "No se debe permitir que continúe esta demanda", dijo Kate Huddleston, abogada de la ONG de Texas.

Más allá de esa decisión, en el primer día de su mandato, el presidente Biden envió este miércoles al Congreso un proyecto de ley de inmigración que abre la senda para la legalización de más de 11 millones de indocumentados e incrementa los recursos para el control de la frontera y la ayuda a América Central para lidiar con las causas de la migración.

Biden ha prometido, además, una revisión de unas 400 ordenanzas con las cuales, sin legislación, su predecesor Trump restringió el asilo, detuvo a decenas de miles de inmigrantes indocumentados e hizo más complejo y costoso el trámite de visas de residencia legal y la adquisición de la ciudadanía estadounidense.

En un cambio semántico, la propuesta sustituye el término “alien”, cuya traducción literal es extraño, por el de “no ciudadano” en los documentos oficiales del Gobierno.

Los temas centrales de la propuesta son una senda hacia la ciudadanía para los indocumentados y el fortalecimiento de las protecciones laborales, prioridad de los controles más eficaces en la frontera y la atención a la causas principales de la migración.

¿Cuáles serán los cambios?

Estos son algunos de los 10 puntos clave del problema migratorio de Estados Unidos y las propuestas de Biden, según su plan difundido.

Primero, un estatus legal temporario para los indocumentados que hayan ingresado al país antes del 1 de enero de 2021 y tengan una permanencia en el país de por lo menos cinco años, tras lo cual se les otorgará la residencia permanente (tarjeta verde). Tres años más tarde, estos inmigrantes podrán solicitar y obtener la ciudadanía estadounidense.

Segundo, el otorgamiento inmediato de la residencia legal permanente a los beneficiarios de los programas Acción Diferida (DACA) y Estatus de Protección Temporal (TPS) y posterior opción de ciudadanía. Tercero, una colaboración con los Gobiernos de México, Honduras, El Salvador y Guatemala y la asignación de recursos para atender las causas económicas y sociales que empujan a millones de personas al camino de la migración ilegal con la esperanza de una vida mejor si llegan a Estados Unidos. Esto incluye la creación de centros de procesamiento en América Central para los trámites de quienes busquen refugio.

Por último, busca la cancelación de la política del Gobierno de Trump —conocida como Protocolo para la Protección de Migrantes (MPP, en inglés)— por la cual decenas de miles de personas que llegaron a la frontera de EE.UU. pidiendo asilo han sido devueltas a México y América Central a la espera de sus trámites de asilo