Mundo

¿Qué es el fósforo blanco? La sustancia que Israel niega que lanzó sobre Gaza y Líbano

La ONG Human Rights Watch denunció que el uso de ese tipo de armas está prohibido internacionalmente en operaciones militares por el alto riesgo para las comunidades.

13 de octubre de 2023

El Ejército israelí ha negado este viernes haber usado fósforo blanco sobre la población de la Franja de Gaza y de Líbano después de que varias ONG, entre ellas Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI), denunciaran el lanzamiento de este tipo de proyectil, que causa severas quemaduras.

“De forma categórica: no”, afirmó el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el teniente coronel Peter Lerner, durante una entrevista en el programa ‘Esta mañana’ de la cadena estadounidense CNN, sin dar más detalles al respecto.

De la misma forma, el Ejército israelí emitió un comunicado este viernes, recogido por la agencia de noticias DPA, en el que asegura que estas informaciones por parte de la ONG son “falsas”. “Las FDI no han utilizado tales municiones”, reiteró.

La ONG Amnistía Internacional informó este mismo viernes en la red social X que investiga el uso de este tipo de proyectil durante “un ataque cerca de un hotel en una playa de la Ciudad de Gaza”. “Amnistía insta a Israel a respetar el Derecho Humanitario en todo momento: se debe proteger a los civiles”, agregó.

Por su parte, la ONG HRW aseguró en un informe que ha verificado vídeos en los que se muestran múltiples ráfagas de fósforo blanco disparadas con artillería sobre el puerto de la Ciudad de Gaza y dos localidades rurales en la frontera con Líbano.

Según la directora de HRW para Oriente Medio y el norte de África, Lama Fakih, el uso de este arma en Gaza, una de las zonas más densamente pobladas del mundo, plantea “un alto riesgo de quemaduras insoportables y sufrimiento de por vida. El fósforo blanco es ilegalmente indiscriminado cuando se hace estallar en zonas urbanas pobladas, donde puede quemar casas y causar daños atroces a los civiles”.

Además, los fragmentos exacerban las heridas y pueden causa insuficiencia orgánica, mientras que las heridas “ya vendadas pueden volver a encenderse cuando se retiran los vendajes al exponerse al oxígeno”. Las cicatrices en los supervivientes crean discapacidades físicas y el trauma del ataque provoca daño psicológico y exclusión social.