“La Alcaldía de Medellín se volvió un hoyo negro”: concejal Daniel Duque
El concejal es una de las voces más críticas de la Alcaldía de Medellín. Aspira a ganar el aval del Partido Verde para llegar a la Alpujarra.
FOTO Esneyder Gutierrez
Directora de EL COLOMBIANO.
Uno de los concejales que más ollas podridas ha destapado en Medellín en los últimos tres años es Daniel Duque. Uno de los nuevos líderes políticos de la ciudad, abogado de Eafit, del equipo político de la senadora Angélica Lozano, ha puesto en evidencia el negocio turbio que se pretendía hacer con la chatarrización de los carros que van a dar a los patios, la contratación de Buen Comienzo con una entidad sin experiencia en el manejo de la infancia, cuyo caso tiene imputada por cuatro delitos a la exsecretaria de Educación Marta Alexandra Agudelo, y explica detalles preocupantes del desastre en el que se ha convertido la oficina de gestión de riesgos y desastres (Dagred) y cómo cambiaron a los técnicos que debían atender los problemas del cambio climático por contratos corbata.
¿Cómo va la búsqueda de aval para su candidatura a la Alcaldía por el Partido Verde?
“Estoy muy emocionado, trabajando fuertemente para ganar el aval. Lo que ha determinado el comité es que se hará una encuesta abierta entre 900 y 1.200 ciudadanos y ciudadanas de Medellín, en la que les van a preguntar en un tarjetón, de manera presencial cuál de los dos candidatos prefieren, si el concejal Jaime Cuartas o mi persona. Esperamos que el resultado se de antes de que acabe junio”.
Son dos alternativas distintas para un partido que ha sido normalmente independiente porque así como usted ha sido uno de esos concejales que le ha puesto la lupa a esta administración, Jaime Cuartas ha estado más del lado del gobierno Quintero...
“Por supuesto que Quintero lo que desearía es que gane mi compañero de bancada, a quien respeto, tengo una relación bastante cordial con él, pero es evidente que sería mucho más cómodo para Quintero que el Partido Verde tenga una candidatura que no esté dedicada a mostrar los desastres que ha habido en esta administración y las propuestas para contrarrestar esos desastres en estos cuatro años”.
Hablemos de esos desastres en los que se han centrado sus denuncias, ¿en qué han quedado esos temas?
“Hemos puesto en conocimiento de las autoridades denuncias de lo que ha pasado en Medellín, la contratación aquí se cartelizó, básicamente le entregaron gran parte de la contratación del conglomerado público de Medellín a empresas bastante cuestionadas. Por ejemplo, el Jardín Botánico tenía todo el mantenimiento de las zonas verdes, el cuidado de la poda y la jardinería, con un componente científico, para entregarle ese contrato a la Reforestadora El Líbano, aliados de Eugenio Prieto, de Carlos Mario Mejía, de Luis Carlos Ochoa”.
Pero eso luego lo reversaron...
“Claro, logramos a través de la presión ciudadana, luego de visibilizar el problema, que se devolviera esa contratación”.
Pasamos como un año en ese problema...
“El primer año y medio de esta administración se deterioraron por completo las zonas verdes precisamente por eso, porque pusieron a una gente sin idoneidad, que el único requisito que cumplían era ser amigos del alcalde. Y entonces por eso terminaron ganándose esos contratos a través de un cambio bastante turbio en el objeto social de Metroparques. Se hicieron toda una triquiñuela jurídica para poder materializar esa situación”.
En lo que sí no se ha podido lograr es que Buen Comienzo vuelva a ser lo que era
“De acuerdo. En Buen Comienzo, por ejemplo, una cosa que era una muy buena noticia en las discusiones de Plan de Desarrollo es que Federico Gutiérrez había invertido $450.000 millones en todo el cuatrienio en Buen Comienzo. Esta alcaldía dijo: nosotros vamos a poner $800.000 millones, todos dijimos ¡van a duplicar el presupuesto para la primera infancia, eso es una gran noticia! Pero con el doble de presupuesto teníamos menos niños atendidos, menos días de atención al año, una menor relación técnica entre profes, pedagogos, nutricionistas vs niños; aumentó la desnutrición crónica infantil, aumentó el bajo peso al nacer y entonces dijimos, pero cómo es posible que con el doble de la plata hoy tengamos unos resultados tan nefastos. Cuando nos metimos a revisar nos dimos cuenta de que le entregaron la contratación, de una parte muy importante de la atención de este programa, a una entidad sumamente cuestionada, que nunca había trabajado con niños de 0 a 5 años, que nunca había contratado en el municipio de Medellín”.
Además relacionada con un clan político cuestionado en Bello
“Tal cual, Colombia Avanza. Y la veeduría Todos por Medellín presentó una denuncia formal ante la Fiscalía con parte de nuestras investigaciones y otras cosas que también investigaron ellos. Debido a eso hay unas personas que están imputadas y si bien no hemos vuelto al estado en el que deberíamos estar en materia de primera infancia, pues ahí van avanzando las investigaciones”.
Las investigaciones avanzan pero los programas siguen en manos de estos grupos que no estaban propiamente preparados para atender a los niños.
“Así es y ahora que estamos en esas discusiones por ejemplo de las transferencias extraordinarias de EPM, están pidiendo plata, entre otras cosas para Buen Comienzo. Esa es una cosa increíble, se gastan más plata y ahora vienen y nos dicen que no tienen plata, son conchudos”.
También denunciaron el contrato de la chatarrización por donde se estaba produciendo una suerte de robo, ¿en qué va ese caso?
“Así es. Debido a la acumulación de carros en los patios de tránsito se autorizó a las autoridades locales vender como chatarra aquellos que llevaran más de dos años. Entonces empezó todo ese proceso de chatarrización y unos señores que le habían ofrecido entre 1.400 y 1.600 pesos por el kilo de chatarra al Ministerio de Transporte 15 días antes de que se materializara la subasta, en Medellín ofrecieron solo 98 pesos por el kilo. Según nuestro cálculo era un descalabro de más o menos unos $30.000 millones por toda esa chatarra. Esa subasta se la ganaron unos señores que tienen unos cuestionamientos, que ya han sido sancionados por la Dian y por otras entidades de control y había varias particularidades. Estos señores se ganaron ese contrato con trampa, porque por ejemplo en los pliegos de la licitación o de la subasta decían que se necesitaba una cizalla de unas características específicas y resulta que ese aparato no existe en el mercado”.
¿Se inventaron un aparato para hacerse valer más?
“Exactamente y entonces yo dije bueno y cómo acreditaron ese tipo de cizalla y nos dimos cuenta que lo acreditaron con un documento de Icontec. Le enviamos un derecho de petición al Icontec preguntando cómo acreditaron algo que no existe y entonces nos dijeron que ese documento no era de ellos”.
Pero eso tiene unas implicaciones penales
“Por supuesto y eso también está en conocimiento de la Fiscalía. Ellos mintieron en un documento que presentaron para ganarse una subasta. Pese a todo, se adjudicó el contrato, pero no se ha firmado entonces seguimos con unos patios llenos de carros que tienen que chatarrizarse de manera urgente”.
¿Y el contratista que aparentemente hizo trampa para ganarse el contrato sigue ahí?
“Así es, él no ha podido empezar la ejecución del contrato porque el contrato no se ha firmado está adjudicado más no firmado. Lo que dicen las autoridades es que es difícil decir que se ha materializado un delito porque el contrato no se ha ejecutado”.
Hay un tema delicado y es el del Dagrd, que para una ciudad con tantos riesgos de desastres, es crucial lo técnico. ¿Y ahí qué fue lo que descubrieron?
“Lo que nosotros demostramos es que el Dagrd terminó siendo una cuota política del senador del Pacto Histórico Alex Flórez, cuestionado y suspendido de su cargo por ocho meses. Allí identificamos que sacaron a muchos de los técnicos, geólogos, ingenieros y pusieron un montón de gente que son puestos corbatas, es decir, personas que tienen el mismo informe de actividades con los mismos errores de ortografía, que ni siquiera se esfuerzan por hacer bien el informe. Muchos de ellos viven en Cartagena como lo denunció la periodista Laura Ardila y están haciendo campaña a la alcaldía de Cartagena para José Luis Osorio, que es el exnovio de la actual directora del Dagrd y que es uno de los mejores amigos de Alex Flórez y pues hemos perdido mucho rigor técnico dentro del Dagrd y además de eso unos escándalos también alrededor de la contratación, como el tema de los 100 radios que compraron para mejorar la comunicación y que tienen una tecnología obsoleta, que no funcionan en zonas de difícil acceso como los corregimientos, porque pierden la señal del celular, y tampoco donde hay grandes aglomeraciones. Nos dimos cuenta de que los únicos que ganaron detrás de todo esto fueron los contratistas. ¿Y quiénes eran? Una empresa llamada Proexcom, que es de Cartagena, la misma ciudad del candidato Osorio”.
¿Usted creería que parte de los desastres que están ocurriendo en Medellín, tienen que ver con la mala gestión y los nombramientos irregulares en el Dagrd?
“Absolutamente y no solo con el Dagrd, es toda la gobernanza que hay alrededor del tema ambiental. El Dagrd entregado a la politiquería, al clientelismo, a la corrupción y a una campaña política en Cartagena, perdiendo gran parte de su rigor técnico. La Secretaría de Medio Ambiente es la más desfinanciada de la historia en el tema medioambiental, sin recursos para gestionar las quebradas, para hacer limpiezas preventivas, para hacer reforestación y demás. La Secretaría de Gestión y Control Territorial, que es la encargada de que no se dispare la construcción ilegal, en manos de Carlos Mario Montoya, que siendo director de Planeación de Luis Pérez en la Gobernación, fue sancionado por construir ilegalmente en una zona de reserva en Rionegro, entonces el que tenía que evitar que construyeran ilegalmente, era el que había construido ilegalmente en Rionegro. El Isvimed también en manos de un funcionario que no sabe dónde está parado, que no está cumpliendo con las metas, que no gestiona los recursos necesarios. Todo el ecosistema de la vivienda, del hábitat, del medio ambiente, de la gestión del riesgo, está en manos de gente sin idoneidad, que está pensando en enriquecerse; en manos de políticos que lo único que quieren es seguir creciendo en sus aspiraciones políticas y muy poco rigor técnico”.
¿Pero ustedes como Partido Verde apoyaron al alcalde Quintero para llegar a la alcaldía?
“No. Teníamos candidata, Beatriz Rave, a quien apoyé con mucho orgullo, hoy es decana de Arquitectura de la Universidad Pontificia Bolivariana, una mujer extraordinaria, sacamos muy poquitos votos, la gente no nos acompañó, yo espero que esta vez la gente sí nos acompañe. Lo que sí pasó fue que cuando ganó Daniel Quintero, el partido dijo vamos a hacer coalición de gobierno. Cuando ganó yo me senté con él antes de que ingresáramos a la coalición, y le dije bueno, usted llegó con unas ideas de cambio, yo había sido opositor al gobierno de Federico Gutiérrez, y le dije para mí estos temas son importantes: yo quiero que tengamos 80 kilómetros de ciclorrutas como se propuso en su programa de gobierno, me dijo sí, finalmente terminaron poniendo sólo 40 de las cuales han construido menos de 10; yo le dije para mí es muy importante el tema de quebradas, el plan de acción climática, los temas de educación superior y la matrícula cero, la renta básica focalizada. Y cuando él me dijo listo, a mí me gustan esas ideas, yo dije bueno podemos ser parte de la coalición de gobierno, pero en menos de ocho días de gobierno ya estaban eligiendo contralor de bolsillo y yo dije aquí no hay nada qué hacer”.
¿Cómo así que eligiendo contralor de bolsillo?
“En la primera semana de concejal era la elección del contralor y la coalición de gobierno, de la que supuestamente yo hacía parte, se estaba reuniendo para decir bueno a quién vamos a elegir en la Contraloría y yo les dije, pero cómo así que a quién vamos a elegir, si cada quien vota por quien le parezca que tiene mejor idoneidad y ya empecé a ver que ahí como que lo que se perfilaba era una negociación burocrática alrededor de las contralorías auxiliares. Les dije miren, qué pena con ustedes, si me tengo que salir de la coalición de gobierno lo hago, pero yo voy a votar por quien considere, finalmente voté en blanco”.
Hay un asunto que está candente hoy en el Concejo y ha sido una de las peleas más duras que se están dando por las transferencias, que la Alcaldía quiere que les permitan transferir de EPM $330.000 millones, ¿por qué se han opuesto de manera tan férrea a ese proyecto?
“Lo primero es que EPM está en una situación financiera compleja, el año pasado cuando nos decían que había que vender UNE, una de las excusas que utilizaba el gerente Carrillo era que había un hueco de $2,3 billones que se necesitaba tapar de alguna manera, yo les decía bueno y si tienen un hueco así por qué le van a sacar $330.000 millones más a las utilidades de la empresa. EPM además está siendo muy mal administrada, lo que está pasando con Afinia donde hay un montón de irregularidades, lo que está pasando con Hidroituango que hoy no sabemos cuál va a ser el futuro de las turbinas 5, 6, 7 y 8, lo que está pasando con el staff directivo, un montón de vicepresidentes que llegaron porque son amigos del alcalde, que no tienen ningún tipo de idoneidad... las decisiones que se están tomando, que afectan la caja, por ejemplo esto de la congelación de las tarifas de servicios públicos, que no es otra cosa que un engaño del alcalde Quintero, porque el próximo alcalde es el que va a tener que asumir ese hueco que está quedando, todo eso hace que hoy EPM esté en una situación financiera muy difícil. Pero además es una alcaldía que ha tenido más recursos en la historia de Medellín, que es la que más transferencias ha tenido por parte de EPM, que es la que más vigencias futuras ha tenido aprobadas para sacar adelante grandes proyectos de ciudad y nosotros no vemos ningún avance, hoy vemos colegios literalmente cayéndose encima de los estudiantes, el 70% de los escenarios deportivos del Inder hoy en mal estado o estado regular, los centros de Metrosalud necesitan más de $200.000 millones en inversión solamente para su infraestructura, sin contar lo que falta en términos del personal asistencial, y entonces uno dice con tanta plata, con tantos recursos, ¿dónde se están invirtiendo?
¿Le preocupa eso que ese dinero que están pidiendo se utilice con fines electorales?
“Por supuesto. Es que uno ve la campaña de Independientes (el partido del alcalde) en Cartagena, en Cali, de todos los candidatos de Quintero, porque Quintero hace mucho rato dejó de ser alcalde de Medellín, Quintero es candidato presidencial y por eso está construyendo un proyecto político en el que quiere sumar alcaldías, gobernaciones en estas elecciones de octubre y entonces nosotros nos preguntamos, esta ciudad caída, la inversión no se ve por ningún lado, con el presupuesto más alto de la historia, con vigencias futuras impresionantes y estos señores siguen pidiendo y pidiendo plata y entonces eso parece que la alcaldía de Medellín se volvió un hoyo negro, uno le mete plata y uno no sabe dónde termina esa plata. Claro que tenemos una preocupación muy grande de que eso termine financiando otras campañas, por supuesto que sí”.
Concejal y por último, ¿si usted fuera alcalde, qué le va a proponer a Medellín?
“Yo creo que Medellín tiene una serie de problemas estructurales, una gran crisis social, económica, climática y ecológica, educativa, de derechos humanos e institucional y Medellín tiene que invertir sus recursos de manera idónea. ¿Qué proponemos? Hay que hacer un gran acuerdo ético de quiénes son las personas que van a llegar a los cargos de libre nombramiento y remoción, cuáles van a ser sus pergaminos y las características bajo las cuales van a ser nombradas y segundo, cómo se va a hacer la contratación pública. Vamos a aumentar los recursos que se contratan a través de la licitación pública. Y vamos a hacer un gran acuerdo programático en torno a unos puntos esenciales. Uno, Medellín tiene que hacer un plan ambicioso de vivienda, el próximo gobierno tiene que construir por lo menos 20.000 viviendas de interés social”.
Pero no hay mucho terreno disponible para ese fin, ¿no?
“No hay mucho terreno disponible, pero tenemos la posibilidad de avanzar en grandes temas. Por ejemplo, avanzar en la renovación urbana para hacer un crecimiento en altura en ciertas zonas planas del Valle del Aburrá y lo que necesitamos es que se dé el cierre financiero, con un gran fondo que el distrito empiece a financiar con 200 o 300 mil millones de pesos iniciales para compra de terrenos. Segundo, Medellín tiene que hacer un gran programa para recuperar lo perdido en temas de educación, desde la primera infancia hasta la educación superior. Lo tercero, yo quiero que tengamos una alcaldía que de verdad prepare a Medellín para la crisis climática y ecológica, porque aquí lo que se viene es muy grave. Se vienen dos años de Fenómeno de El Niño donde vamos a tener desabastecimiento de agua, sequías muy grandes para los campesinos, particularmente en los corregimientos que van a ser necesarios grandes programas de distritos de riego. Y creo que también es muy importante recuperar todo lo perdido en materia de infraestructura. En resumen, un gran tema de lucha contra la corrupción. Dos, un gran tema de vivienda, mejoramiento integral de barrios y renovación urbana. Y tres, un gran tema de adaptación a la crisis climática y ecológica. Y de ñapa, cómo recuperamos nuestra infraestructura”.