Inflación de 2020, la más baja en la historia del Dane
En mis bolsillos hay una grabadora y unos audífonos; en mi mente, amor por el periodismo.
En el 2020 los colombianos percibieron un alza promedio de 1,61 % en el costo de vida, que estuvo por debajo de la de 3,80 % en 2019. Esto se conoció luego de que el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) entregara los resultados del Índice de Precios al Consumidor (IPC) o inflación.
Según detalló el director de esa entidad, Juan Daniel Oviedo, se trata de la inflación más baja para un año calendario registrada por el Dane, desde que la empezó a medir en 1954. El funcionario ejemplificó que estuvo por debajo, incluso, del dato de 2,03 % observado en 1955, que era el que hasta ahora poseía ese ‘récord’ (ver Claves).
Además, Oviedo resaltó que el renglón económico que percibió la mayor alza fue salud, con una variación anual del 4,96 %, en parte gracias a la presión en la demanda de elementos como “jarabes para la tos, vitaminas y analgésicos”.
Así mismo, alimentación y bebidas no alcohólicas tuvo un ajuste hacia arriba de 4,80 %, mientras que restaurantes y hoteles hizo lo propio con 3,43 %, aunque este último dato estuvo por debajo del de 2019, cuando fue de 4,23 %.
”En la medida en que el país estuvo confinado por casi seis meses consecutivos, menos personas comieron fuera del hogar y por eso las tarifas disminuyen (frente al 2019)”, detalló Oviedo.
En contraparte, anotó que la educación tuvo un cambio hacia la baja con un -7,02 %, una contracción considerable respecto al aumento de 5,75 % en 2019. “El Dane encontró que en las ciudades y áreas evaluadas existió una fuerte corrección sobre las matrículas de la educación básica preescolar, primaria y secundaria, que es la que está causando este comportamiento”.
Relación con el mínimo
Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria, explicó que “la inflación es una referencia importante para hablar de salario mínimo, pues va a ayudar a evaluar qué tanto poder de compra se gana o se pierde con los incrementos de este”.
“Por ejemplo, en 1990 el salario mínimo subió el 26 %, mientras que la inflación de 1989 fue del 26,2 %, lo que muestra que en ese año en términos reales (es decir descontando el efecto del incremento en el costo de vida) el salario mínimo se ajustó muy cerca al encarecimiento promedio de los bienes y servicios que consumían los hogares en ese entonces”, aseguró Piraján.
En tanto, Alejandro Reyes economista de BBVA Research, mencionó que la baja inflación y productividad del país denotaban la importancia de no tener una subida muy fuerte del salario mínimo.
Un aumento considerable de esa remuneración, con una baja capacidad de producción –o productividad–, anota, hubiese resultado en mayor poder adquisitivo pero sin menos cosas para comprar, lo que llevaría a pagar más por las mismas cosas y a un potencial choque inflacionario.
Ahora, los colombianos deberán encarar el 2021 con un encarecimiento del costo de vida en sus niveles más bajos y un salario mínimo que tuvo un ajuste de 3,5 %