Presidente de Uber presentó ayer su renuncia
La salida reflejaría la intención de la junta directiva de mejorar gobierno corporativo de la tecnológica.
Periodista del área de Economía
Los escándalos recientes de la multinacional estadounidense Uber evidencia debilidades en la cultura interna. Por tanto, la renuncia ayer del fundador y presidente de Uber, Travis Kalanick, tras la presión ejercida por cinco de los mayores socios, es una oportunidad para mejorar el gobierno corporativo de la compañía.
Así lo señaló el gerente de la consultora en gobierno corporativo SaladeJuntas, Ricardo Mejía Cano, pues el líder del grupo de alquiler de vehículos con conductor se retiró como consecuencia de recientes despidos masivos, renuncias en serie de una veintena de directivos y acusaciones de acoso sexual, discriminación y sospechas de robo de tecnología a empresas como Google.
“Esos recientes movimientos reflejan una intención de renovar el manejo del gobierno de la empresa. Pese a los escándalos, no hay dudas del reconocimiento internacional de la marca”, añadió Mejía.
No obstante, el efecto de la salida de Kalanick dependerá de las decisiones que tome ahora la junta directiva, indicó la jefe de la Unidad de Gobierno Corporativo de la Cámara de Comercio de Medellín, Diana Domínguez Arcila. Agregó que ahora el rol de ese órgano es más relevante, al tener en sus manos una sucesión adecuada al frente Uber para dar “un nuevo rumbo a la estrategia corporativa”.
Así mismo, que el fundador deje el liderazgo ejecutivo no implica que renuncie a su posición de accionista. “Son dos roles completamente diferentes”, aclaró Domínguez.
De hecho, Kalanick seguirá siendo parte del consejo de administración. Según cálculos de Bloomberg, él tiene una participación en la compañía de un 12 %, con valor neto de 6.700 millones de dólares.
Uber ya estaba buscando un jefe de operaciones. Ahora, la firma también busca un presidente, así como un director de mercadeo y un consejero general (asesor jurídico). Entre tanto, varios altos ejecutivos fueron promovidos, luego de la salida de sus jefes.
Con la renuncia de su fundador, las especulaciones sobre una posible salida a bolsa también se ha enfriado. Mientras tanto, el grupo Lyft, su competencia, toma ventaja de los problemas de imagen y legales de los últimos días