Economía

“Necesitamos mayor inversión en gas natural”

Andrés Sarmiento, presidente (e) de Naturgas, habló sobre el potencial del país y los retos de la industria.

Periodista de economía y negocios. Egresada de la gloriosa Universidad de Antioquia.

17 de junio de 2021

El más reciente informe de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) expuso que las reservas probadas de gas natural en Colombia disminuyeron por tercer año consecutivo, pasando de 8,1 años a 7,7 años de vida útil, lo que significó un decrecimiento del 6,7 %, en comparación con las cifras del 2019. Una caída que retó al país a trabajar para revertir este escenario.

Según el Ministerio de Minas y Energía, actualmente se encuentra en desarrollo el Plan de Abastecimiento de Gas Natural, que incluye ocho proyectos de infraestructura de transporte de gas, los cuales representarán inversiones por más de 800 millones de dólares, incluida la Planta de Regasificación del Pacífico, que se estaría adjudicando a finales de este mes.

EL COLOMBIANO habló con Andrés Sarmiento, presidente (e) de la Asociación Colombiana de Gas Natural en Colombia (Naturgas), sobre el panorama actual de las reservas probadas (1P) de ese hidrocarburo, los proyectos que propone para asegurar el abastecimiento, por qué este es importante en la transición energética del país y cómo se podría atraer una mayor inversión e incentivar el aprovechamiento de los recursos.

¿Por qué el gas natural es clave en la transición hacia las energías limpias?

“El gas natural tiene bastantes atributos, pero me enfocaré en tres que lo hacen fundamental en el rol que jugará en la transición energética. El mundo está pensando cada vez más en tecnologías limpias en los energéticos que usamos y el gas natural aquí se ubica muy bien. Lo primero es la calidad del aire, una problemática de salud pública que existe en diferentes ciudades del país, Medellín es una de ellas. Para esta, el gas natural tiene una solución particular y es que reduce las emisiones de material particulado en el 99 %. Así que cuando estás usando gas natural en la movilidad o en la industria tienes un proceso energético que casi no tiene este tipo de emisiones. Lo segundo es que el mundo también está hablando del cambio climático y la necesidad de descarbonizar las matrices energéticas. En este aspecto el gas natural tiene un rol muy importante y es que, si se compara con los energéticos sustitutos principales como el carbón y el diésel, este tiene emisiones inferiores entre el 30 % y el 50 % de CO2. También se ha planteado tener disminuciones de CO2 del 20 % para el 2030, con el gas natural se podrá cumplir esa meta. El tercer factor es que es un energético muy competitivo y esto permite que se logre cubrir los dos atributos necesarios en las matrices energéticas del mundo”.

¿Cómo están las reservas probadas de gas para el país?

“Cuando miramos la reservas de gas natural hoy, que son cercanas a tres terapies cúbicos, es bastante gas el que tiene el país actualmente. Tenemos alrededor de 7,7 años, hay gas natural para garantizar el abastecimiento en el corto y mediano plazo; sin embargo, como sector y como país hay que aprovechar el potencial que tenemos. Hay reservas potenciales en la región Caribe, por ejemplo, y en costa afuera. Podríamos multiplicar nuestras reservas por cinco veces solamente en el mar Caribe. Actualmente en Colombia el 20 % o 25 % de la producción es por descubrimientos que se han hecho en cuencas convencionales durante los últimos siete años. Por otro lado, en este momento se están llevando a cabo proyectos pilotos de investigación y esperamos que, a través del desarrollo de estos, el país pueda dar una señal para el desarrollo de los yacimientos no convencionales. Según un inventario que hicimos recientemente tenemos solamente en proyectos de exploración y producción alrededor de 1.100 millones de dólares que se van a invertir en los próximos tres o cuatro años para el desarrollo de esta actividad en Colombia”.

¿Se muestra entonces optimista frente al abastecimiento de este energético?

“El potencial es tan grande que lo que se debe garantizar, desde una perspectiva de país, es cómo hacer que las inversiones se puedan llevar a cabo. El país identifica en sus reservas unos recursos contingentes que requieren soluciones puntuales para poder desarrollarlos, entonces ahí el llamado que nosotros hacemos es a poder agilizar los procesos de licenciamiento ambiental, los procesos de consultas con las comunidades y los de transporte, con el fin de permitir que estas reservas que están alrededor de un tera, es decir, una tercera parte adicional a las reservas probadas que tiene el país en este momento, están en recursos contingentes. Es por esto que necesitamos que se tomen medidas por parte de el Gobierno Nacional para que se permita, se agilice y se dinamice la actividad para llevar estos recursos a reservas 1P, con el fin de tener tranquilidad en el abastecimiento a largo plazo”.

¿Cuáles son las principales causas o efectos que han provocado la disminución de las reservas de gas natural?

“Hay un consumo dinámico del sector de gas natural y eso genera que las reservas se vayan agotando. Por otro lado, aunque hemos logrado ir reponiendo el gas que se produce, la foto, cuando se miran anualmente las reservas, refleja solo la imagen de un momento del tiempo, pero la actividad que realmente ocurre en este sector es de todos los días. Históricamente, el país ha tenido dos grandes fuentes de gas natural: Guajira, probablemente en desarrollo hace 30 años; y Cusiana y Cupiagua, hace 25 años. Estos dos grandes yacimientos son los que nos han permitido garantizar el consumo en el largo plazo. Es también normal que estos yacimientos hayan comenzado un proceso de declinación, y en ese sentido lo que se está haciendo es avanzar en actividades dinámicas de exploración y producción para ir reponiendo esas reservas”.

En días pasados usted afirmó que la industria de gas natural necesita que se garantice la seguridad jurídica, ¿a qué se refiere con esto?

“Colombia, en general, tiene un buen nivel de seguridad jurídica. Los proyectos de gas natural son de largo aliento, son decisiones de inversión a riesgo. Los inversionistas que hace 30 años desarrollaron Guajira y Cusiana y Cupiagua, por ejemplo, hoy todavía siguen ahí. Es muy importante que se mantengan las condiciones y las reglas de juego para continuar con los incentivos para que la actividad se desarrolle. El llamado que siempre hacemos como sector productivo es a que mantengamos las señales de seguridad jurídica que permitan que estos desarrollos por parte de inversionistas, que llegaron al país porque creen en él, tengan las señales adecuadas y estables en el tiempo”.

¿Cuáles son los retos que ve para el sector?

“Lo primero es que podamos desarrollar todo el potencial que tenemos. Que los incentivos y el dinamismo en la actividad se mantengan, por parte tanto de la industria privada como del gobierno. Ahí vemos con buenos ojos que durante los últimos años los procesos de rondas de adjudicación de nuevos bloques se hayan reiniciado. Ya se socializó, por parte de la ANH, la ronda 2021 en la cual se están dando señales para que hayan nuevos bloques que se adjudiquen en las cuencas de Valle Medio y Valle Inferior del Magdalena, Sinú- San Jacinto y Llanos Orientales. Otro de los retos es seguir posicionando al gas natural con el rol que le está dando el mundo en la transición energética. Según la Agencia Internacional de Energía, de aquí a 2040 el crecimiento del gas natural en la matriz energética será de alrededor 1,2 % cada año”