Columnistas

A favor del medio ambiente

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30 de julio de 2015

Por
Paula cañas cadavid
Politécnico Grancolombiano
Periodismo, tercer semestre
paulycda@gmail.com

Mirado desde la óptica del mercadeo, la publicidad y la economía, aquel dicho que reza que mientras más se tenga, más se gasta, y que mientras más se pueda, más se cambian las cosas, cobra más sentido en esta sociedad que persigue las modas.

En la actualidad, hay seres humanos que se definen por sus consumos. La gente compra objetos que no necesita para aparentarle a una sociedad que le da mucho valor a lo material.

Lo único que queremos, por ejemplo, es comprar un producto con nueva tecnología. Cuando lo tenemos ya no lo queremos y hacemos lo posible por desecharlo en menos de lo que se debería.

Pero, ¿qué pasa cuando te enteras de todo lo que hay detrás de la fabricación de miles de productos que llegan a nuestras manos por un precio insignificante? ¿Qué pasa cuando nos ponemos a pensar en las personas que han extraído, producido y sacado a la venta lo que yo hoy compro por menos de 5 dólares?

Son niños, adolescentes, mujeres y hasta ancianos, sin ninguna oportunidad, los que ensamblan muchos de estos productos. Jóvenes a los que les toca salirse del colegio para ir a producir en fábricas el objeto que compramos por menos de 5 dólares, un valor al que ni siquiera llega una hora de su tiempo.

¿Por qué están educándonos en la idea de comprar-tirar? El mundo moderno está diseñando para desechar, para que los productos sean inútiles lo más rápido posible.

Las empresas generan productos para los que en tres años no se encontrarán repuestos, obligando al consumidor a reemplazarlos. Lo que importa, al parecer, es seguir produciendo y ganando.

Y, ¿el medio ambiente? Sufre por culpa de producciones no amigables, con todos los desechos, algunos altamente dañinos para el equilibrio del planeta. La Tierra se desgasta mientras se hacen más y más objetos de consumo, que nosotros seguimos desechando.

Y los países más vulnerables a los daños colaterales de este consumismo son generalmente los mismos, los más pobres. Un círculo vicioso

*Taller de Opinión es un proyecto de
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