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AL OPONERSE A OBAMA, LOS REPUBLICANOS CREARON A TRUMP

15 de abril de 2016

Un memo para los legisladores republicanos comiéndose las uñas por las primarias de Nueva York, preguntándose si finalmente podrán estropear la candidatura de Donald J. Trump (nudo en la garganta) con Ted Cruz: ustedes se lo buscaron.

No solo por demorarse demasiado para tomar en serio a Trump o por su falta de una respuesta efectiva una vez lo hicieron. Eso es terreno ya bien cubierto. Más importante, ustedes crearon la furia que elevó su candidatura después de años que pasaron bloqueando sistemática y efectivamente la aprobación de legislación que tal vez habría mejorado el duro estado económico de los votantes centrales de Trump.

De manera desproporcionada, los seguidores de Trump son blancos, de mediana edad, hombres de clase trabajadora sin educación universitaria, un grupo cuyas fortunas han decaído a medida que la globalización y nuevas tecnologías han vuelto obsoletos a millones de empleos y recortado los sueldos de muchos más.

Para demasiados, esa nueva dinámica sí que ha sido dolorosa. En Michigan, donde Trump tuvo una gran victoria, los sueldos en el sector de la manufactura han caído de un alto de USD 28 por hora en el 2003 a 21 actualmente.

Mientras tanto, la cantidad de empleos de manufactura en el estado han caído de casi 900.000 en septiembre de 1999 a poco menos de 600.000 actualmente.

A lo largo de su presidencia, Barack Obama ha presentado propuestas constructivas para ayudar a aquellos trabajadores desplazados.

Obama presentó propuestas para créditos más altos por el cuidado de los niños; inversiones en universidades comunitarias; expansión del crédito al sueldo; cambios a planes de jubilación para que puedan trasladarse entre empleadores y sean disponibles a trabajadores de medio tiempo; y créditos para las comunidades manufactureras.

Todas estas, y muchas otras, fueron ignoradas por el Congreso. Incluso pasos al parecer obvios, como darle continuidad a los beneficios federales de emergencia para la gran cantidad de desempleados a largo plazo, han sido bloqueadas. Desde la aprobación del Acta de Cuidado Asequible, 19 estados, en su mayoría con gobernadores republicanos, han rechazado el plan de expansión de Medicaid de Obama.

En su presupuesto más reciente, la Casa Blanca presentó un plan para el seguro salarial, un concepto con mucho apoyo entre economistas. Bajo este, un empleado quien perdió su empleo y se vio obligado a aceptar otro de salario más bajo que paga menos de USD 50.000 al año recibiría la mitad de sus sueldos perdidos por dos años, hasta USD 10.000.

Como muchas de las propuestas de Obama, eso no cambiaría la situación para los americanos de clase trabajadora, pero habría sido una pieza constructiva en una solución más integral.

Sin lugar a dudas, Obama tuvo éxito en lograr aprobación de algunas de sus iniciativas el año pasado, como volver permanente el crédito al impuesto al sueldo, el crédito por los hijos y asistencia modesta para americanos mayores actualmente afectados negativamente por el comercio. Y Obama merece reconocimiento sustancial por la caída en el desempleo bajo su administración.

Pero eso no es progreso suficiente. Por un lado, el apoyo a Trump se concentra en sectores de baja participación de fuerza laboral. Por otro, con los verdaderos salarios en decaída para muchos americanos, la promulgación de iniciativas menores no es mayor cosa.

Quien gane la nominación republicana, es demasiado tarde para manejar las preocupaciones de los constituyentes base de Trump antes de noviembre. La furia de tantos no será aliviada hasta que Washington tome pasos afirmativos.

Para aliviar el dolor inmediato, necesitamos una red de seguridad más fuerte: beneficios de desempleo extendidos para los desempleados a largo plazo, seguro salarial y cosas similares. Es obvio que hay que detener nuestra austeridad frenética y aumentar la inversión en infraestructura. Todo esto debe ser financiado por impuestos más altos a los ricos.

Los republicanos tienen que prestar atención: dado su bloqueo a la legislación que ayudaría a los americanos oprimidos, su furia realmente debería estar enfocada hacia ustedes.