Columnistas

Intercambiando conocimiento

28 de julio de 2015

Uno de los grandes inventos del siglo pasado ha sido el internet que, con un solo clic, borró el tiempo y el espacio e hizo posible una “democratización” de la información y el conocimiento que, hoy día, están al alcance de cualquier ciudadano. Este intercambio que plantea la red se da en todos los niveles, todo se puede encontrar y comunicar en ella, elevados tratados científicos, pasando por noticias, ideas, hasta posturas personales. Todo con una inmediatez de vértigo: desde twitter con su imposición de pocas palabras, hasta libros digitalizados de acceso gratuito en diferentes plataformas. Pero la virtualidad, además de lo anterior, es una gran oportunidad para co-crear el desarrollo, para la innovación abierta, para la inteligencia colectiva que hoy se estimula en las empresas privadas para desarrollar nuevos productos, procesos y servicios. Sin embargo, a nivel del ciudadano y de las ciudades todavía este tipo de técnicas no son de uso frecuente. Siempre he creído que es en el sector público, y en nuestro caso, no debemos ser ajenos a estas nuevas tendencias de desarrollo, donde se estimula la cooperación entre grupos de personas para resolver retos complejos, en este caso de ciudad.

La globalización nos integra cada vez más y nos permite entender que nuestros problemas son similares a los de otras sociedades, que en algunos casos los han afrontado de manera diferente a la nuestra, demostrando que sí pueden ser solucionados algunos de ellos. Por esta razón cuando estructuramos Medellinnovation en sus cuatro vectores, planteamos dos momentos ligados a plataformas. Uno de ellos, Mimedellín, que funciona como plataforma de co-creación ciudadana en línea, hoy opera y cuenta con más de 13.000 ciudadanos brindando ideas a la ciudad, lo cual ha tenido una evolución bastante interesante, ya que muchos ciudadanos pasan de solo criticar a generar ideas que puedan convertirse en soluciones. Y, de otro lado, tenemos Cities For Life, un encuentro de ciudades alrededor del intercambio de conocimiento global, de retos conjuntos y de aprendizajes en busca de experiencias exitosas. Este evento está desarrollando una plataforma permanente donde se accederá a casos de éxito, pero también, allí se subirán diferentes retos de ciudades para que, de manera solidaria entre ciudades hermanas, se busquen nuevas alternativas de solución.

Hace una década nunca nos imaginamos que Medellín pudiera ser un centro para el intercambio de conocimiento y estar a la vanguardia de actuales tendencias en innovación. Con más de 45 ciudades confirmadas de varios continentes, un grupo de universidades internacionales que están listas para ser nodos de procesamiento de problemas locales, entre ellas, Eafit para Medellín, Purdue para Estados Unidos, entre otras, desde nuestra ciudad estamos integrándonos para que el planeta sea más solidario, competitivo e innovador.

Por último, esta idea nace, se planea y desarrolla desde Medellín para el mundo. La innovación no se gesta solo desde acá, la innovación se da por el cruce de miles de ciudadanos y de diferentes culturas. Hemos entendido que es la diversidad la que nos abrirá más oportunidades al desarrollo de nuevas soluciones para los retos de la humanidad .