La visión a largo plazo de la educación
Por Rafael Aubad
raubad@proantioquia.org.co
El Ministerio de Educación Nacional se encuentra en la primera fase de construcción del Plan Decenal de Educación-PNDE-, el cual deberá marcar la política pública en este campo para los próximos 10 años. Este espacio de consulta y de construcción colectiva, se vuelve decisivo para comprometer a todos los actores con una educación innovadora, incluyente pero lo más importante, de construcción desde lo regional.
Es apremiante la participación de todos los actores del Sistema; instituciones educativas, secretarías, maestros, padres de familia, directivos docentes, universidades, grupos de investigación y estudiantes, solo por mencionar algunos. Debemos reflejar en el PNDE los aportes desde los aprendizajes y experiencias que se han desarrollado en Antioquia y en Medellín. Lo regional debe alimentar y conversar con lo nacional. Entender hacia dónde iremos como país desde las necesidades locales, se vuelve más imperativo en la construcción de paz. Las dinámicas educativas regionales deben garantizar que la igualdad de oportunidades y una educación de calidad, blinden a las poblaciones más vulnerables de cualquier posibilidad de repetir las situaciones que nos llevaron a los más de 50 años de conflicto.
El PNDE se desarrolla en 4 fases. La primera, es una encuesta de temáticas, en el que tendremos la oportunidad de definir los matices de la educación para los próximos 10 años. La segunda, serán foros presenciales y virtuales en los que se podrá debatir y construir sobre las temáticas. En la tercera, se espera tener foros en los 1.128 municipios y en todos los departamentos. Todo esto, para la redacción definitiva del PND 2016-2025.
Hace un año, la tarea que asumió Medellín, fue la formulación de su Plan Educativo Municipal -PEM- para los próximos 12 años. Este plan, que ya está listo, tiene como principio la dignidad humana y la formación en capacidades humanísticas y sociales. Busca la responsabilidad y equidad a través del involucramiento activo de la familia, los empresarios, los maestros, los estudiantes y la comunidad. Debemos lograr que los elementos que planteamos en el PEM sean visibilizados en el PNDE. Tenemos mucho que aportar al ámbito nacional desde nuestro proceso de construcción local.
Lo valioso de estas herramientas de planeación (PNDE y PEM) es que permiten que las políticas públicas trasciendan los gobiernos de turno. En educación, como en todas las políticas sociales, la trascendencia en el tiempo es decisiva para lograr resultados contundentes y visibilizar de manera acertada los desarrollos en el largo plazo. En Medellín, logramos que diversos actores, despojados de matices políticos y de urgencias de los gobiernos de turno y sin importar su origen público o privado, se sentaran a definir el futuro de la educación.
El reto como país no es menor al que enfrentamos como ciudad en este proceso de construcción colectiva. Hay que pensarse el PNDE desde las garantías y oportunidades que queremos lograr en el Sistema. Una Colombia en paz necesita que la educación sea la obsesión de todos y no solo de unos pocos.