LO QUE ES SHARIA (Y LO QUE NO ES)
Por NOAH FELDMAN
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Afortunadamente, nadie va a seguir el plan inconstitucional y antiamericano propuesto por Newt Gingrich de una inquisición para “poner a prueba a todas las personas de ascendencia musulmana” y deportar a quienes “creen en Sharia”. Incluso el mismo Gingrich, un día después de sugerir esta política en el tiempo que siguió al ataque terrorista en Niza, Francia, reconoció que tal plan era imposible. Pero su propuesta es un recuerdo de la incomprensión persistente de lo que es Sharia, tanto en teoría como en práctica.
Puesto simplemente, para musulmanes creyentes, Sharia es la realización ideal de la justicia divina, una ley superior que refleja la voluntad de Dios.
Los musulmanes tienen una gama de creencias en cuanto a lo que Sharia requiere en la práctica. Y todos están de acuerdo en que los humanos son intérpretes imperfectos de la voluntad de Dios. Pero preguntarle a un musulmán fiel si “cree en” Sharia es esencialmente preguntarle si acepta la palabra de Dios. En efecto, Gingrich estaba proponiendo la deportación de todos los musulmanes que se consideran creyentes religiosos.
Empiece con una distinción crucial. Sharia no significa simple y exactamente ley islámica. Hablando correctamente, Sharia se refiere a la heliografía de Dios para la vida humana. Es divina e invariable, reflejando la unidad y perfección de Dios. Se puede encontrar en la palabra de Dios revelada en el Corán y en las acciones guiadas divinamente del Profeta Mahoma.
En contraste, otra palabra árabe, ‘fiqh’, se refiere a la interpretación y aplicación de Sharia en el mundo real. Fiqh es ley islámica practicada por las personas. Dado que es un producto del razonamiento humano utilizado para entender la palabra de Dios, la ley islámica es sujeta al debate y la imperfección.
En otros países Sharia ha llegado a tener otros significados. Promotores del Islam político, las personas que creen en el eslogan “Islam es la respuesta”, a veces usan el término para describir a un gobierno que cumple con la ley islámica.
Los islamistas políticos, o islamistas, reconocen que las normas legales clásicas, derivadas del Corán, las acciones del Profeta Mahoma, tienen que ser suplementadas por más regulaciones legales y administrativas. Cuando buscan incorporar a Sharia en sus constituciones, usualmente están pidiendo legislación moderna informada por ley clásica islámica, y también algunas veces una norma que dice que ninguna legislación puede violar las normas legales clásicas islámicas. Los ideólogos del Estado Islámico pretenden seguir exclusivamente a la ley Sharia. Lo que eso significa en la práctica es que justifican sus políticas con referencia a resoluciones que pueden encontrarse en el vasto corpus de escritos legales clásicos islámicos.
Pero debe decirse que el Estado Islámico sí trata de fundamentar sus prácticas sobre alguna base islámica. En este sentido, dice estar produciendo una utopía islámica, una que sus seguidores creen llegará lo más cerca a la ley Sharia de orden divina.
El extremismo y el terrorismo justificado por Sharia han alimentado los esfuerzos americanos para decir que Sharia o el mismo Islam es la fuente fundamental del problema. En el 2010, Oklahoma apoyó de manera abrumadora una enmienda constitucional estatal prohibiendo a sus cortes “considerar o usar la ley Sharia”. Legalmente la medida era innecesaria, dado que la cláusula original de la Constitución de los Estados Unidos ya habría prohibido a las cortes civiles aplicar la ley religiosa. Los comentarios de Gingrich son la iteración más reciente en el esfuerzo por convertir a Sharia en un blanco. Su meta parece ser negar la condena de musulmanes per se diciendo que los musulmanes no serían peligrosos con tal que rechacen a la ley Sharia.
Pero eso es como decir que los cristianos serían aceptables con tal que repudien la doctrina de la divinidad de Cristo, o que los judíos podrían ser tolerados si niegan la revelación de Dios ante Moisés en el Sinaí. Sharia es tan esencial para la fé islámica ortodoxa. Eso no significa que todos los musulmanes aceptan los dogmas de la ley islámica de la manera en que son interpretados por las escuelas de pensamiento más extremas. Una gran mayoría rechazan el uso de Sharia para legitimar el terrorismo..