Columnistas

SINCHI, IIAP y los Candidatos

19 de noviembre de 2017

Esta semana dialogamos con los candidatos a la Presidencia de la República sobre el agua. Una de las conclusiones casi por unanimidad ha sido la no creación o modificación de entidades para la gestión ambiental en Colombia. Inclusive después del gran recorte presupuestal hecho este año al sector ambiente los candidatos insisten que no modificarán la figura de “autonomía” de las autoridades ambientales como las corporaciones autónomas regionales, Cars, ni de la Autoridad de Licencias Ambientales, Anla, ni mucho menos del Ministerio de Ambiente. Lo que no saben los candidatos es que la responsabilidad por levantar la información local proveniente de la investigación local para la toma de decisiones locales certeras, hecha por los institutos de investigación, hace tiempos no tiene un peso.

Dos de esas entidades anónimas muy poco mentadas en Bogotá pero heroínas en su territorio, como muchas en Colombia, especialmente, las dedicadas a la educación y a la investigación, son los institutos IIAP y el Sinchi. Ambos pertenecientes al Sistema Nacional Ambiental -Sina-, vinculadas al Ministerio de Ambiente, pero con una gran responsabilidad en los territorios más olvidados y con más conflictos crecientes en Colombia.

Para los que no lo recuerdan, en 1993 el Congreso de Colombia expidió la Ley 99, por la cual se creó el Ministerio del Medio Ambiente, hoy Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, se reorganizó el Sistema Nacional Ambiental -Sina- y se transformó la Corporación Colombiana para la Amazonia Araracuara, en el Instituto Amazónico de Investigaciones Científicas -Sinchi-, organizada como una corporación civil sin ánimo de lucro, de carácter público, pero sometida a las reglas de derecho privado, vinculada al Ministerio de Ambiente, con autonomía administrativa, personería jurídica y patrimonio propio.

Su objetivo es la realización de estudios e investigaciones científicas de alto nivel relacionados con la realidad biológica, social y ecológica de la región amazónica, conocer su realidad biológica, social y ecológica en dicha jurisdicción. Su visión para este año era ser la mejor institución de investigación científica y tecnológica de carácter ambiental, de alta calidad y competitividad con la región amazónica y el país, así como contribuir en los procesos de desarrollo sostenible y lograr su reconocimiento a nivel nacional e internacional. Quiero decirles que su directora Luz Marina Mantilla lo ha logrado. Empezando porque este año le entregó a Colombia el más importante centro de investigaciones amazónicas de la región.

De la misma manera, y con la misma Ley se crea el Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacífico “John Von Neumann” -IIAP-, también organizado como una Corporación Civil sin ánimo de lucro, de carácter público pero sometida a las reglas de derecho privado, con autonomía administrativa, personería jurídica y patrimonio propio.

Su misión es actuar como instrumento para incrementar la capacidad de investigación de la región y de sus actores sociales e institucionales, orientando sus investigaciones al servicio de los grupos étnicos y demás pobladores de la región; a la identificación de opciones para el mejoramiento de las condiciones de vida de la población, surgidas de la oferta natural de la región y a servir como foro de debate y discusión alrededor de los temas de este multidiverso territorio. Su capacidad institucional se enmarca en procesos participativos, para la generación, utilización, transmisión y socialización de conocimientos para el bienestar material y espiritual de la población del pacífico. Con grandes resultados y productos poco conocidos en Bogotá, pero que su director y líder William Klinger, siempre carga orgullosamente en sus bolsillos.

¿Qué tanto saben los jóvenes de lo que hacen anónimamente estos investigadores en sus multidiversos territorios pero con grandes conflictos sociales, ambientales y económicos crecientes? Visiten sus sedes respectivas en Leticia y Quibdó, o naveguen deliciosamente por sus redes sociales o páginas web www.iiap.org.co y www.sinchi.org.co. Y para los candidatos no olviden que con-ciencia es la única manera que podrán cumplir su compromiso de reconstruir y reconciliar a Colombia.