También conocido como Parque de Deportes a Motor, Autódromo de Antioquia o Parque Tulio Ospina, este escenario ubicado en el municipio de Bello, Antioquia, hace parte de la concesión de 97,6 hectáreas donadas en el año 1973 por la familia Ospina. El lote ha sido utilizado para el desarrollo de la región: talleres del Metro, estadio de fútbol y hasta la construcción de algunas viviendas. Sin embargo, no para su fin último: un escenario de recreación y deportes, con la capacidad de albergar hasta 26 disciplinas, que beneficie a los habitantes del valle de Aburrá. El escenario es tan grande, que allí podrían construirse por lo menos 120 canchas de fútbol.
Más de 30 años han pasado en los que esta obra se ha visto afectada por discusiones técnicas, licitaciones tardías, líos jurídicos, solicitudes ambientales, detrimento patrimonial y conflictos políticos y sociales. Una historia que pronto cambiará de rumbo gracias a los esfuerzos de la comunidad, en cabeza del ciudadano Hernán Cuartas, quien se puso la camiseta para impulsar la ejecución total de la obra. Algunas voluntades de administraciones locales y el control fiscal de la Contraloría General de la Nacional han permitido que este espacio pase de estar “inconcluso” a un proyecto ad portas de cambiar la realidad del territorio. Conozca la historia.
La obra Central Park es un proyecto de impacto regional y nacional que beneficiará a más de 4 millones de personas en el Área Metropolitana, a través de una inversión aproximada de $160.000 millones. A la fecha, cuenta con un avance físico del 91% y financiero del 89%. Avances que traen ilusión a las comunidades tras 30 años de espera. En la foto, el estado actual del proyecto Central Park.
“Medellín necesita un autódromo”, esta fue la idea con la que el ciudadano Hernán Cuartas impulsó desde los años 80 la recuperación de la obra Central Park.
En la foto, Hernán Cuartas en el año 1992, acompañado del sector oriente del lote donado por Tulio Ospina.
La promesa de convertir el terreno de 97,6 hectáreas en un polideportivo se fue desdibujando con la destinación e invasión del predio para otros propósitos. Por esto, el ciudadano Hernán Cuartas tomó las riendas de su recuperación, encontrando en este no solo un espacio, sino la oportunidad de convertirlo en un parque de deportes a motor y náutico. En el año 1996, entonces, diseñó y registró dicho proyecto en Bello, Medellín, el Área Metropolitana y Antioquia. En la foto, en uno de los primeros planos.
En el año 2005, Hernán fundó la corporación Ecoparmo, un gremio motor que se creó para promover el automovilismo en Antioquia e impulsar la construcción de este parque. Para entonces, Cuartas ya se encargaba de cuidar el terreno de posibles invasiones y, ese mismo año, sin tener aún ningún tipo de infraestructura, la corporación realizó el primer Festival Metropolitano Deportes a Motor y Náutico, en el que participaron disciplinas como canotaje, ski náutico, ciclomontañismo, motocross y campercross. En la foto, los deportes de motocross y ski náutico que participaron en el festival.
Pero el autódromo tardó años en comenzar y los proyectos de vivienda comenzaron a instalarse en los terrenos aledaños, lo que significó un nuevo reto: tomar medidas reglamentarias para reducir la contaminación ambiental y auditiva, y lograr acuerdos con la comunidad para el desarrollo del escenario. En la foto, Conjunto Residencial La Vida es Bella, que colinda con las instalaciones del Central Park.
La construcción, finalmente, inició en el año 2019, pero los conflictos no tardaron en aparecer. Así, en medio de retrasos y algunas alertas por detrimento de patrimonio, Hernán acudió a la Contraloría General de Nación. El entonces Contralor General de la República, Felipe Córdoba, visitó las instalaciones en agosto de 2021 y se encontró con que la obra avanzaba a paso muy lento. Desde entonces, se han abierto investigaciones e instalado mesas de diálogo, en las que sientan la veeduría ciudadana, la Gobernación, los contratistas y la Contraloría para proyectar el fin de la obra. En la foto, avances de la obra para el año 2020.
A pesar de que la obra aún no culmina, los exgobernadores Luis Pérez y Aníbal Gaviria ya la han inaugurado a pocos días de terminar su administración.
Actualmente, se proyecta culminar la construcción del Parque con una inversión adicional de cerca $3.000 millones. En la foto, inauguración por Luis Pérez en 2019.
Hernán cuenta que para que este proyecto se convierta en un polo de desarrollo turístico del Área Metropolitana, aún hay desafíos: la socialización y acuerdos con la comunidad aledaña, la recuperación de espacios invadidos, la ampliación de la vía Machado y la reubicación de los lugares destinados a reciclaje de materia industrial y chatarra. En la foto, un basurero de chatarra al frente del parque.
El Central Park contará con 2,6 km. de longitud para deportes como Fórmula 3 e Indy Lights; está diseñado para convertirse también en patinódromo y pista de atletismo. El lago será usado para disciplinas náuticas. Un escenario multipropósito que también albergará festivales y conciertos con aforo hasta para 90.000 personas. Además, promoverá la investigación académica mediante alianzas con las facultades de Ingeniería Automotriz de instituciones como la UdeA, la Universidad Nacional, EAFIT y el SENA. En la foto, las tribunas actuales del autódromo.
Hernán afirma que el papel de la Contraloría ha sido fundamental en la continuidad del proyecto y en su acompañamiento a la ciudadanía. Las mesas de diálogo han originado una conversación continua, con información precisa que vela por el cuidado de los recursos y la eficiencia en la construcción de la obra. En la foto, Hernán Cuartas en la actualidad de espalda al proyecto Central Park.