Ciencia

Nuestra galaxia habita un agujero del universo

08 de junio de 2017

Para decir coloquialmente, a la colombiana, nuestra galaxia la Vía Láctea, y nosotros, vivimos en la quinta porra, como había sugerido en 2013 un estudio observacional de Amy Barger y Ryan Keenan de la Universidad de Wisconsin-Madison. Sí, una región vacía, que contiene pocas galaxias, estrellas y planetas.

En un nuevo estudio de la misma universidad, se reafirma que vivimos en una especie de agujero de queso, si el universo fuera uno de estos productos lácteos. Un hallazgo que además ayuda a reducir el aparente desacuerdo entre distintas medidas de la constante de Hubble, esa unidad que usan los cosmólogos para describir la tasa a la cual se expande el universo.

Estos hallazgos fueron presentados en la conferencia anual de la Sociedad Astronómica Americana.

El desacuerdo radica en que el uso de distintas técnicas para medir la velocidad de expansión da un resultado diferente. “Sin importar la técnica que use, debería obtener el mismo valor de la expansión hoy”, explicó Ben Hoscheit, quien presentó sus hallazgos.

“Afortunadamente vivir en un lugar vacío resuelve el desacuerdo”.

La razón es que ese vacío, con muchísima más materia fuera de él ejerciendo un mayor jalón gravitacional, afecta el valor de la constante usando supernovas relativamente cercanas, mientras que no lo afectará si se usa la radiación cósmica de microondas de fondo, ese residuo de luz del Big Bang.

El nuevo reporte es parte de un gran esfuerzo para entender la gran estructura del universo, que semeja un queso suizo en el sentido de que está compuesto de materia normal en la forma de agujeros o vacíos y filamentos. Estos están compuestos de cúmulos y supercúmulos de galaxias, que están conformadas por estrellas, gases, polvo y planetas. La materia y la energía oscuras, que no pueden ser vistas directamente, comprenden cerca del 95% del contenido del universo

El vacío que contiene la Vía Láctea, conocido como el de Keenan, Barger y Cowie, es al menos 7 veces más grande que el promedio, con un radio de cerca de 1000 millones de años luz. Hoy es el vacío más grande conocido.

Este hueco tiene forma de esfera con una cobertura que aumenta en grosor constituida de galaxias, estrellas y otra materia.