El cambio en los mercados externos y la consecuente caída del precio internacional del café, junto al ajuste revaluacionista de la tasa de cambio en los últimos meses, son factores que han llevado a la reducción del precio interno del grano.
Si en meses anteriores, gracias a los mejores precios externos (en noviembre de 2016 se presentó un pico) y a una buena tasa de cambio, los caficultores gozaron de altos precios internos (que en ciertos momentos superaron el millón de pesos), ubicándose por encima de los costos de producción, hoy, como ocurre normalmente en los mercados de los bienes básicos, el precio se mantiene en niveles bajos como consecuencia del aumento de la producción y de la oferta mundiales.
A pesar del período de los buenos precios,...