La angustia hoy en nuestro medio es un sentimiento generalizado. Los reportes preocupantes, el seguimiento de los medios de comunicación y las conversaciones cotidianas, hacen que nuestra mente no tenga otra palabra distinta: Hidroituango. El proyecto más grande en construcción en el país, atraviesa una situación muy compleja. Pero el drama más intenso es para los empleados y contratistas de EPM y las comunidades afectadas. Todos hablamos, por supuesto, ante todo, de los segundos.
Hoy quiero hablar de los primeros. Pensando en los ingenieros y obreros que no paran de trabajar, con riesgos de sus vidas y en los líderes del proyecto comprometidos todo el tiempo, quiero rescatar aquellos valores que los mantienen.
Traigo al respecto, dos recuerdos...