Antioquia

La tristeza por el icónico árbol que será talado por obras viales en la 80

Periodista de la Universidad de Antioquia interesado en temas políticos y culturales. Mi bandera: escribir siempre y llevar la vida al ritmo de la salsa y el rock.

17 de diciembre de 2019

A través de redes sociales un grupo de vecinos de la carrera 80, en Medellín, llamó la atención sobre un enorme árbol ubicado en un antejardín, cerca a la intersección con la calle 50, que sería talado por proyectos viales.

“¡Adiós amigo! Llegaste primero que nosotros y nos acompañaste todos estos años”, expresó el colectivo en la cuenta de Twitter @vecinosdela80, y agregó que la ciudad se transformó talando árboles para “cultivar vías”.

Este comentario tuvo eco y algunos usuarios lo compartieron en sus perfiles, con mensajes de desaprobación frente a la tala, otros solicitando explicaciones e incluso pidiendo coherencia a la administración municipal, pues por un lado promueve los corredores verdes, pero también pide autorización para cortar árboles para construir obras.

“En el Valle del Aburrá, el Área Metropolitana da permiso para cortar árboles y construir edificios que se llenan de carros y luego tienen que tumbar mas árboles para ampliar las calles, y luego dicen que están controlando el nivel de CO2”, escribió el ciudadano Guillermo Maya.

Cabe recordar que las intersecciones de la carrera 80 con las calles 50 y 44 son dos tramos que la Alcaldía de Medellín, a través de la Secretaría de Infraestructura Física, intervendrá para adecuar intercambios viales, que en el futuro incluso pueden ser vitales para la llegada del tren ligero.

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En una resolución del Área Metropolitana, citada por el mismo colectivo, la entidad ambiental señala que “el componente arbóreo presenta en general, regulares condiciones fitosanitarias y estructurales, principalmente por ramificaciones desde la base, fustes torcidos, podas antiguas mal cicatrizadas, raíces expuestas, daños mecánicos en ramas y tallos, evidencia de podas de despeje por redes eléctricas que han generado pérdida de arquitectura y mal desarrollo del sistema radicular, la mayoría por encontrarse en espacios limitados que no permiten su óptimo desarrollo”.

Por otro lado, también menciona que hay algunos árboles que pueden ser trasplantados, uno que fue encontrado muerto en pie y, en síntesis, que muchos de los árboles solicitados para la intervención están en regular o mal estado.

¿Qué dice la autoridad ambiental?

EL COLOMBIANO transmitió la preocupación de la ciudadanía al Área Metropolitana, y esta entidad compartió sus consideraciones, aunque específicamente del árbol en cuestión que generó las inquietudes del colectivo no hubo un pronunciamiento concreto.

Efectivamente la autoridad ambiental confirmó que existe un permiso de “aprovechamiento forestal” otorgado para el desarrollo de las obras viales y agregó que, en un comienzo, el proyecto abarcaba más zonas verdes, pero la alcaldía desistió, por ejemplo, del tramo de la carrera 80 con calle 70, algunas áreas a la altura de la carrera 52, no construirá una ciclorruta planteada al inicio, y se rediseñaron algunos giros sobre las calles 43 y 44 para impactar menos la vegetación.

De esta manera, señaló el Área Metropolitana, en la carrera 80 con calle 50 pasaron de conservarse solo 11 árboles a 87. Allí mismo, dijo la entidad, se talarán 66 árboles y ya no los 104 contemplados anteriormente.

La autoridad ambiental explicó que con los cambios que se hicieron las zonas verdes aumentarán con relación a las que hay antes de la intervención. Además, la reposición deberá ser de 491 ejemplares que deberán plantarse en áreas cercanas a las obras, más el trasplante de 27 árboles, para un total de 518.

“Estas nuevas medidas muestran un panorama diferente del proyecto; debido a que los impactos ya no tienen una extensión a nivel de toda la red, sino que son impactos localizados y/o puntuales en términos espaciales (...) Las zonas verdes se incrementarán con respecto a las existentes en el área de intervención”, manifestó el Área Metropolitana.

El líder ambientalista José Fernando Álvarez, más allá de este debate, aprovechó el momento para llamar la atención sobre la cantidad de avisos, pendones y otros elementos pegados en los árboles, y sugirió a las autoridades recorrer la carrera 80 para resolver esta problemática que afecta a las especies allí sembradas.