Video | Benedetti y Montealegre sellan su reconciliación con un apretón de manos y un libro sobre estoicismo
Los ministros hicieron las paces tras la filtración de un chat en el que el titular de Justicia había tildado de corrupto al del Interior. Ambos aseguraron haber dejado atrás las rencillas y reafirmaron su compromiso con la agenda de paz total.
Un fraterno apretón de manos, seguido de la entrega de un libro y un cordial abrazo, selló la reconciliación entre los ministros Armando Benedetti (Interior) y Eduardo Montealegre (Justicia). Lo anterior, luego de qué días atrás, se filtró un controvertido chat en el que este último señaló a Benedetti de “desprestigiar a los compañeros de gabinete” y advirtió que “pronto” iría a la cárcel “por corrupto”.
No obstante, ambos funcionarios se dieron cita este martes a expensas del exmagistrado Julio César Ortiz y, en medio de risas y un ambiente cordial, parecieron dejar las rencillas de lado. Incluso, al encuentro terminó llegando el exembajador Roy Barreras.
“Un regalo milenario (...) es que Armando Benedetti puso de moda la filosofía estoica y él es un estoico. Por eso, voy a contribuir a su formación filosófica de la Grecia clásica”, dijo Montealegre, que le regaló al ministro el libro “Estoicismo, una introducción a la filosofía del arte de vivir”.
“Soy un pichón”, respondió entre risas Benedetti, quien luego agradeció el gesto de su compañero de gabinete. “Le agradezco el espacio para habernos podido congraciar de nuevo. Leeré con entusiasmo cada hoja del libro que me regaló”, manifestó.
La semana pasada, en chats que terminaron filtrados a la prensa, el ministro de Justicia señaló a Benedetti de “desprestigiar a los compañeros de gabinete” y advirtió que “pronto” iría a la cárcel “por corrupto”. Montealegre lo acusó además de “hablar paja y sembrar caos”, y no tramitar el proyecto para el sometimiento de grupos criminales en el Congreso.
Frente a ello, ayer el ministro de Justicia insistió en que es “tarea común” de ambos ministerios impulsar el proyecto de paz total: “Nos debemos concentrar más que en debates personales, en esas tareas institucionales que son muy importantes para el país”.
Según el ministro, su interés es “cerrar el capítulo” con Armando Benedetti: “no quiero continuar haciendo más descalificaciones hacia él y quiero hacer un avance institucional, construir una relación institucional muy fuerte entre los dos ministerios para el bien de muchos proyectos que le interesan al país, entre ellos el de la paz total”.
Previamente, en diálogo con EL COLOMBIANO, Benedetti le bajó la espuma a la rencilla y negó tener rabia contra el ministro de Justicia. Ratificó además que no le iba a contestar y que para pelear se necesitan dos.
“Para que haya una pelea usted tiene que tener rabia u odiar a alguien, y yo no tengo rabia ni odio contra él. Lo que sucedió fue que di unas declaraciones a la Revista Semana en las que dije que el gabinete era flojo, y eso provocó esa reacción inesperada y siguió días después. Eso fue lo que pasó, pero yo nunca contesté nada, nunca dije nada. Por eso me molestaba que los medios dijeran ‘rencilla’ o ‘pelea’, porque pelea es cuando hay dos. Si hay alguien que grita y grita, y el otro no dice nada no hay pelea”, dijo.