En misa de Ramos, el papa pidió valentía ante pandemia que suma 65.000 muertos
El papa Francisco ofició la misa del Domingo de Ramos, que marca la entrada de la Semana Santa, en una basílica de San Pedro desierta debido a la pandemia de coronavirus, que ya se cobró la vida de 65.000 personas en el mundo.
El 15 de marzo, el Vaticano anunció que todas las celebraciones litúrgicas de Pascua se llevarían a cabo “sin la presencia física de los fieles” en la plaza de San Pedro.
Así, este domingo, el papa bendijo los Ramos en una basílica vacía, salvo por un puñado de religiosos y religiosas, sentados cada uno en un banco.
La misa fue difundida en directo en la página web del Vaticano, como también lo será el próximo domingo para la misa de Pascua, la celebración más importante del cristianismo.
“Hoy, en el drama de la pandemia, ante tantas certezas que se desmoronan, frente a tantas expectativas traicionadas, con el sentimiento de abandono que nos oprime el corazón, Jesús nos dice a cada uno: ‘Ánimo, abre el corazón a mi amor. Sentirás el consuelo de Dios, que te sostiene’, dijo el papa argentino en su homilía.
Dirigiéndose a los jóvenes, Francisco mencionó el esfuerzo de todos aquellos que pese al riesgo de contagio salen a la calle para ayudar a los otros.
“Mirad a los verdaderos héroes que salen a la luz en estos días. No son los que tienen fama, dinero y éxito, sino son los que se dan a sí mismos para servir a los demás. Sentíos llamados a jugaros la vida. No tengáis miedo de gastarla por Dios y por los demás: ¡La ganaréis!”, añadió.
El llamado del sumo pontífice en la misa del Domingo de Ramos llegó luego de que el presidente Donald Trump pidiera a los estadounidenses prepararse para una semana “horrible” y antes de un inusual discurso de la reina Isabel II que pedirá este domingo a los británicos asumir unidos el “desafío” de la pandemia.
Los implacables números de la enfermedad COVID-19 no dejan de aumentar: hasta este domingo había más de 1,2 millones de contagios en 190 países y 65.272 muertos desde que el virus apareció en China en diciembre, según el último conteo de AFP.
Más de 47.000 de las muertes están en Europa, pero España e Italia, los más golpeados y ya con sus sistemas sanitarios colapsados, registran una caída de la llegada de enfermos a los hospitales.
La pandemia también avanza en América Latina, que registraba este domingo casi 30.400 casos confirmados y 1.052 muertos. En América Latina, al igual que en África, hay países con sistemas sanitarios frágiles o muy deteriorados, y gran parte de sus poblaciones viven del sector informal, lo que hace muy difícil aplicar las medidas de confinamiento.
La mitad de la humanidad está confinada, escuelas y negocios cerrados, con gran costo para la economía mundial. El impacto social y económico de esta nueva pandemia sigue brotando por todas partes.
La OMS asegura que “lo peor está por venir” en los países en conflicto o donde hay campamentos de refugiados, generalmente sobrepoblados.
Podría leer: Semana Santa se vivirá desde casa