Nacional perdió un partido, no la posibilidad de llegar a la final

Por Byron García
@jbyrongarcia

Sebastián Gómez era uno de los jugadores que más pedía la hinchada. Ante Tolima jugó todo el segundo tiempo. FOTO COLPRENSA.

Sebastián Gómez era uno de los jugadores que más pedía la hinchada. Ante Tolima jugó todo el segundo tiempo. FOTO COLPRENSA.

Hay derrotas que duelen no tanto por lo que significan sino por la manera en que suceden. La de este miércoles ante el Tolima fue una de esas, una derrota amarga para quienes vimos jugar a Nacional. El partido del Verde fue casi perfecto, superó a su rival en lo táctico, en lo estratégico, en lo físico, en lo futbolístico… en todo menos en el gol. El único pero fue la falta de eficacia, esa que pesa aún más cuando repasas el juego y ves que los “pijao” solo generaron dos opciones de gol y metieron una.

Osorio, a quien le hemos cuestionado decisiones cuando no son favorables, hay que reconocerle la excelente planificación del partido y el repaso futbolístico que le dio a Alberto Gamero. Le tapó las bandas al Tolima con Helibelton y Muñoz por derecha, y con Mafla y Cabal por la izquierda. Ubicó dos volantes recuperadores para cerrar por dentro y, a partir de allí, generar juego. Hubo doblajes a los rivales, presión alta, incomodidad permanente. En una palabra más sencilla, sacrificio.

En ataque, Candelo como falso nueve tenía loca a la defensa contraria. Saliendo a recibir fue muy bueno, en dos ocasiones metió pases precisos a Muñoz para que la empujara, pero éste no estuvo fino. Jarlan y Cepellini se juntaron bien, se intentó todo. Nacional tuvo el 63% de la posesión del balón, remató 26 veces al arco y generó 7 opciones claras para anotar. Por eso es que duele perder un partido así, el visitante fue claramente superior al local.

Lea también: El as verde bajo la manga llamado Osorio

Hubo variantes. Mientras veía el partido leía comentarios de hinchas por Twitter pidiendo un nueve en propiedad, un definidor para solucionar la falta de gol. Mi papá mirando pedía lo mismo, era válido. Osorio lo hizo, pero Barcos no pesó en los minutos que estuvo. Podríamos alegar que el llamado era para Cucchi (más potente y venía de anotar ante Cúcuta), pero ya no fue así. Se quemó un cambio con la amarilla de Rovira, quien salió por Gómez, y otro con el necesario ingreso de Bocanegra para evitar una contra del rival y sacar limpio el balón desde atrás. Pero en la chancha el revolcón fue mayor, terminamos hasta con Baldomero de centro delantero a ver si de pronto, pero no entró. No era la noche.

Súmele el arbitraje, para decirlo sencillo y sin mucho análisis, dos errores determinantes: el gol del Tolima partió de una falta no sancionada sobre Cabal, y se tragó una mano en el área que era penal a favor de Nacional.

Sabíamos que de haber ganador en el partido, el equipo que se quedara con los tres puntos se perfilaba para jugar la final. En eso Tolima sacó ventaja, pero no todo está perdido. El Verde aún depende de sí mismo, debe ganar los dos juegos en casa (uno de ellos contra el Tolima) y buscar tres puntos por fuera, bien sea en Cúcuta o en Barranquilla. Lo otro es que el conjunto del profesor Gamero ayer salió estallado físicamente, pidiendo tiempo por la intensidad del partido. Eso lo puede hacer tropezar, no todo está escrito.

Nacional ha hecho dos grandes presentaciones en el inicio de los cuadrangulares, total respaldo al cuerpo técnico y al grupo de jugadores que han actuado. Se les ha visto compromiso y entrega. Este fin de semana nos vemos en el Atanasio, es nuestro deber como hinchas ir a alentar, a empujar, mantener la fe y seguir soñando con la 17.
————————–
Síganos en Twitter e Intagram:  

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>