Entre el Ñeñe y el ñoño oscilan las elucubraciones en torno al actual Fiscal General de la Nación: o la orden de detención preventiva domiciliaria contra Aníbal Gaviria obedece a una cortina de humo para encubrir algo sobre la relación del Ñeñe Hernández con Iván Duque, o Francisco Barbosa es tan ñoño –corto de ingenio– que se dejó usar para un escándalo mediático cuyas consecuencias no calculó con cautela. (O es un genio incomprendido...).
Muchos ciudadanos respetamos las instituciones y tratamos...